El toque de atención dado por este inversor es especialmente significativo dada su capacidad para pronosticar las medidas económicas adoptadas por el Gobierno británico en los últimos meses.

En este sentido, Platt comenzó a hablar de los beneficios de la creación de dinero seis meses antes de que el Banco de Inglaterra pidiera permiso al ministro de Economía, Alistair Darling, para tomar esa medida, que se bautizó en la jerga de los economistas como "alivio cuantitativo".

Finalmente, el pasado 5 de marzo, el organismo supervisor anunció la inyección al sistema de 75.000 millones de libras (unos 84.000 millones de euros), destinados a la compra de bonos corporativos y del Estado -gilts-, para aumentar la liquidez.

No obstante, Platt considera ahora que esta cantidad no es suficiente y sostiene que el "alivio cuantitativo" debería ampliarse y pasar "a otro nivel superior" para poder sostener los niveles actuales de gasto público, toda vez que los ingresos fiscales del Estado se han reducido.

Para el financiero, la impresión de moneda representa "el modo más fácil de salvar el sistema".