El Consejo de Gobierno del BCE apunta que no ve signos materiales de tensiones en los mercados monetarios o escasez de liquidez en el sistema bancario, sin embargo estas operaciones aprobadas hoy proporcionarán un respaldo efectivo en caso de necesidad.

El organismo que preside la francesa Christine Lagarde ha elevado este jueves de forma extraordinaria las compras de activos hasta los 120.000 millones al mes frente a los 20.000 millones actuales este 2020 con el objetivo de "asegurar una fuerte contribución de los programas de compras del sector privado (bonos corporativos)".

El BCE realizará también nuevas operaciones de refinanciación a largo plazo (LTRO, por sus siglas en inglés) de forma temporal para proporcionar "apoyo de liquidez inmediato" al sistema financiero de la eurozona.

Se llevarán a cabo a través de un procedimiento de licitación a tipo fijo del -0,5%, el tipo de interés medio de facilidad de depósito, por lo que la banca ganará dinero por pedir prestado al BCE. "Estas operaciones proporcionarán liquidez en términos favorables para abarcar el periodo hasta la operación TLTRO-III de junio de 2020", ha subrayado el Consejo de Gobierno de la entidad.

El BCE ofrece más liquidez y eleva las compras hasta los 120.000 millones en 2020

El BCE también ha modificado los términos de su tercer programa de operaciones de financiación a largo plazo con objetivo específico (TLTRO III), que se aplicarán durante el período comprendido entre junio de 2020 y junio de 2021 a todas las operaciones. "Estas operaciones respaldarán los préstamos bancarios a los más afectados por la propagación del coronavirus, en particular las pequeñas y medianas empresas", apunta el BCE en su comunicado.

A lo largo de este período, el tipo de interés de estas operaciones TLTRO III estará 25 puntos básicos por debajo del tipo medio aplicado en las principales operaciones de refinanciación del Eurosistema. Es decir, los bancos obtendrán un interés del 0,25% por el dinero que pidan prestado al BCE en el marco de estas operaciones, ya que el tipo de interés de referencia está situado en el 0%.

Para las entidades bancarias que mantienen sus niveles de provisión de crédito, la tasa aplicada en estas operaciones será más baja y, durante el período que finaliza en junio de 2021, puede ser tan baja como un -0,75% frente al -0,5% que ofrecían las anteriores condiciones. Si las entidades financieras inyectan esa liquidez a la economía real podría ganar un 0,75% al año sólo por haber pedido prestado dinero al BCE.

Además, el montante total máximo que las entidades bancarias tendrán derecho a pedir prestado en operaciones TLTRO III se eleva al 50% de su stock de préstamos elegibles al 28 de febrero de 2019. 

El BCE ha mantenido sin cambios los tipos de interés de referencia para sus operaciones de refinanciación en el 0%, mientras que la tasa de facilidad de depósito continuará en el -0,50% y la de facilidad de préstamo en el 0,25%, con el objetivo de no perjudicar el margen de intereses de los bancos.

La prima de riesgo ofrecida a los inversores en bonos españoles con vencimiento a diez años en comparación con sus homólogos alemanes se ha disparado este miércoles un 37%, hasta situarse en 130,6 puntos básicos, tras conocerse el nuevo paquete de estímulos que el Banco Central Europeo (BCE) ha aprobado para atajar el impacto del coronavirus en la economía.

Rebaja las previsiones económicas

El Banco Central Europeo (BCE) ha revisado a la baja sus previsiones de crecimiento e inflación para la zona euro en los próximos años por el impacto del coronavirus, aunque la presidenta de la entidad, Christine Lagarde, ha reconocido durante la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno de la entidad que estos pronósticos han quedado obsoletos por la rápida propagación de la enfermedad, que se ha convertido en pandemia.

Las últimas proyecciones del BCE para el PIB de la eurozona contemplan un crecimiento del 0,8% en 2020 y del 1,3% en 2021, lo que implica una "notable revisión a la baja" para este año respecto al pronóstico del pasado mes de diciembre y un ligero empeoramiento para el próximo año, mientras que para 2022 la entidad anticipa una expansión del 1,4% .

Nuevo apoyo a la banca

“El coronavirus está demostrando ser un shock significativo para nuestras economías. Los bancos deben estar en condiciones de continuar financiando a los hogares y las empresas que experimentan dificultades temporales. Las medidas de supervisión acordadas hoy tienen como objetivo apoyar a los bancos para servir a la economía y abordar los desafíos operativos, incluida la presión sobre su personal", apunta Andrea Enria, presidenta del Consejo de Supervisión del BCE.

El BCE permitirá a los bancos operar temporalmente por debajo del nivel de capital definido por el búfer de conservación de capital (CCB) y el índice de cobertura de liquidez (LCR). El BCE considera que estas medidas temporales se verán reforzadas por la relajación adecuada del colchón de capital anticíclico (CCyB) por parte de las autoridades macroprudenciales nacionales.

Los bancos también podrán usar parcialmente los instrumentos de capital que no califican como capital común de nivel 1 (CET1), por ejemplo, instrumentos adicionales de nivel 1 o nivel 2, para cumplir con los requisitos del pilar 2 (P2R). Esto es una medida que inicialmente estaba programada para entrar en vigencia en enero de 2021, como parte de la última revisión de la Directiva de Requisitos de Capital (CRD V).

Las medidas anteriores proporcionan un alivio de capital significativo a los bancos en apoyo de la economía. El organismo monetario espera que los bancos utilicen estar herramientas "para apoyar la economía y no aumentar la distribución de dividendos o los 'bonus' a sus consejeros".

El BCE también explica que a la luz de la presión operativa sobre los bancos, el instituto emisor apoya la decisión de la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés) de posponer los test de estrés a la banca europea. El objetivo de ambos organismos es dar flexibilidad a los bancos para que vayan reduciendo los préstamos fallidos mientras siguen concediendo crédito a la economía real.

El próximo encuentro del Consejo de Gobierno del BCE se celebrará el próximo 30 de abril.

Reacciones del mercado

Desde Aberdeen Standard Investments, su economista Paul Diggle apunta que en su opinión "se han producido dos aciertos y un fallo. Los éxitos se refieren al aumento del programa QE y el nuevo programa TLTRO-III, dos medidas que son claramente bienvenidas y deberían ayudar a mantener la liquidez en la economía. El tipo de interés del -0,75% en los préstamos de TLTRO a los bancos es una innovación importante, porque es la primera vez que el banco central presta a los bancos a un tipo inferior al oficial- en cierto sentido, es un recorte de los tipos muy dirigido-."

"El fallo tiene que ver con que no se ha producido una rebaja en la facilidad de depósitos principal, lo que resulta una decepción frente a las expectativas del mercado, y envía la señal de que incluso el propio BCE piensa que está al final del camino cuando se trata de recortar los tipos de interés", añade Diggle.

Andrew Bosomworth, director de inversiones de PIMCO en Alemania indica que "dejar la tasa de la facilidad de depósito sin cambios en el -0,5% refleja implícitamente que el Consejo de Gobierno reconoce la efectividad limitada de los recortes de tipos por debajo de los niveles actuales".

"El programa de compras del BCE sugiere una inclinación en las compras hacia los bonos corporativos. Sin embargo, la reacción inicial en los mercados crediticios ha sido negativa, ya que los diferenciales se han ampliaron aún más, lo que subraya tanto las altas expectativas puestas en el BCE como la fragilidad del entorno actual del mercado", añade

Por su parte, el analista Javier Molina de eToro comenta que el "mercado esperaba unas medidas más contundentes dada la actual situación, y el Ibex-35 pierde más terreno mientras se encamina, desde un punto de vista técnico hacia la zona crítica de los 6850-6900 puntos. Pese a las lecturas de sobreventa y sentimiento inversor en mínimos, la pérdida de esta referencia sería muy negativa para sesiones futuras y pondría los mínimos de 2012 como posible objetivo bajista (5900 puntos). Por el contrario, si se consigue mantener al cierre, puede ofrecer cierto nivel de soporte de corto plazo, siempre desde un punto de vista técnico".