Ante este contexto, el ministro ha defendido hoy su propuesta de limitar la contratación en origen a casos muy concretos, y admitió que, cuando hizo pública esta iniciativa, quizá no hizo una exposición "lo suficientemente amplia para que hubiera sido comprendida al 100%".Ha asegurado que el pasado viernes, tras las declaraciones de la vicepresidenta primera María Teresa Fernández de la Vega en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros no se sintió desautorizado. "Lo que hizo es clarificar un concepto que se había malinterpretado, seguramente por una mala explicación mía", añadió.A juicio de Corbacho, los flujos migratorios se guían en función de las demandas del mercado de trabajo. "En un momento en el que hay 2,5 millones de parados y el paro está creciendo, parece lógico" limitar la contratación en origen a las profesiones en las que sigue habiendo demanda, entre las que citó el caso de médicos.Aseguró que esta iniciativa es "bastante razonable", y aseguró que, en cualquier caso, "la inmigración cero no existirá nunca" porque en determinadas profesiones la contratación de extracomunitarios en origen seguirá siendo necesaria. Recordó que hace dos años en España había una situación de "pleno empleo", con lo que muchos sectores tenían que acudir al exterior a buscar profesionales. Estas vacantes actuales "pueden ser cubiertas por gente que está en paro", exceptuando las tareas que requieren de un determinado nivel de especialización.RECHAZA LAS ACUSACIONES DE "XENÓFOBO" Corbacho lamentó las acusaciones de "xenófobo" que la semana pasada hizo el número 2 de la concedería de Interior de la Generalitat, Joan Boada (ICV-EUiA) y dijo: "Las cosas no tienen que extremarse". "No puedo compartir esta difamación y espero que Boada sea más cuidadoso cuando haga según qué valoraciones", añadió el ministro.
"DERECHOS Y OBLIGACIONES" DE LOS INMIGRANTES Corbacho declaró que la inmigración es "altamente positiva y contribuye a la riqueza" del país, pero que el debate no tiene que centrarse en analizar las "esencias", sino en "gobernar este fenómeno", que es global, lo que pasa por entender que los inmigrantes tienen "derechos y obligaciones". "Inmigración, toda la que haga falta", pero "regular y legal", concretó Corbacho, quien precisó que el inmigrante ilegal que vive en España tiene que "regresar" a sus orígenes.Sostuvo que su posición sobre inmigración sigue siendo exactamente la misma que cuando era alcalde de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), que es la segunda ciudad más poblada de Catalunya con un elevado porcentaje de ciudadanos extracomunitarios. "Sería bueno que en este tema los partidos mayoritarios nos pusiéramos de acuerdo" para gobernar "con sentido común" el tema de la inmigración. "Haría daño poner una etiqueta ideológica a la inmigración", dijo Corbacho.
