El terremoto fue seguido por una ola de diez metros que ha matado a cientos de personas y ha barrido con todo con lo que se encontraba a su paso. El número de muertes se espera que crezca.

“A pesar de que todavía es pronto para hacer unas estimaciones acerca del impacto que el seísmo ha provocado, lo que sí parece claro es que la bolsa del país no caerá durante mucho tiempo” ha afirmado Olgerd Eichler
a la CNBC este viernes.

El desastre es otro desafío en la recuperación de la economía japonesa. Históricamente, los grandes desastres naturales no suelen producir caídas drásticas en los mercados de valores inmediatamente después de que suceda, pero pueden tener importantes consecuencias en sus economías y los mercados pueden caer tiempo después.

La erupción del volcán Eyjafjallajoekull en Islandia el año pasado, que ocasionó el cierre del espacio aéreo europeo durante una semana, supuso pérdidas de 1,7 billones de dólares para las compañías aéreas. No obstante, los valores de las aerolíneas solo cayeron alrededor de un 5% en los tres días después de la cancelación de los vuelos.

En enero de 2010, Haití fue devastada por un terrible terremoto que causó la muerte de 316.000 personas. El coste total de este desastre ronda los 14 billones de dólares. Los mercados de todo el mundo no sufrieron grandes cambios ese día.

En agosto de 2005, el huracán Katrina derribó los diques de la ciudad de Nueva Orleans y provocó la muerte de más de 1.300 personas. Se estima que los costes en la economía americana fueron de 45,15 billones de dólares de acuerdo con el Insurance Information Institute. 400.000 personas perdieron su trabajo. El Katrina apenas tuvo efectos en Wall Street en los dos meses posteriores.

Tras el tsunami de 2004 en el que murieron más de 230.000 personas, las bolsas de India e Indonesia acabaron la semana con una subida de un 1%, mientras que las de Tailandia y Malasia apenas variaron. El principal problema se produjo en el turismo.

El Nikkei cerró la sesión con una caída del 1,7%, hasta los 10.254 puntos. El Ibex 35 ha terminado en números rojos (-0,36%) y el Eurostoxx 50 también ha caído un 0,89% hasta los 2.883,84 puntos. Wall Street ha abierto con un descenso pero ahora mismo sus tres principales selectivos suben: el Dow Jones un 0,49%, el Nasdaq un 53% y el S&P 500 un 0,72%.