Las tendencia mixta se instala en el mercado americano. Aunque parece que comienzan a disiparse las preocupaciones de los inversores acerca de la salud de las entidades, los indicadores tienen poca fuerza y ganas de subir en la apertura. Sólo el Dow Jones ha conseguido abrir en positivo pero no ha tardado en darse la vuelta. En los primeros minutos de negociación cotiza plano sobre los 8.113 puntos. El tecnológico pierde un 0,45% y se instala en los 1.662 puntos en tanto que el SP-500 permanece en beneficios del 0,08%, hasta los 865 puntos. Comportamiento que se produce a la espera de la comparecencia de Ben Bernanke, que se producirá ya avanzada la sesión, y del dato de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan de abril. 



Gráfico Dow Jones



En el plano empresarial, al optimismo inyectado por dos de las grandes entidades – Goldman Sachs y JP Morgan- durante la semana, llega una nueva oleada de confianza gracias a Citigroup. La entidad registró una pérdida de 0,18 dólares por acción derivado de los costes de conversión de las acciones preferentes y el pago de dividendo de su deuda. Cifras que han estado por encima de las previsiones de los analistas y que dejan unos ingresos de 24.790 millones de dólares en los tres primeros meses del año, el doble de hace un año y ha reducido sus gastos hasta los 24.790 millones de dólares. Los títulos de la compañía pierden más del 3% en los primeros minutos de negociación. Del resto de entidades, Goldman Sachs apenas sube un 0,08% y JP Morgan pierde un 0,43% hasta los 33,24 dólares. Por otro lado, la entidad online BB&T Corp repunta un 2,66% después de anunciar que registró una ganancia neta de 318 millones de dólares durante el primer trimestre, una disminución del 26% frente al beneficio de 429 millones del mismo período del año anterior. La aseguradora American Internacional Group (AIG) se revaloriza un 0,59% y logra los 1,69 dólares tras anunciar que deberá vender su participación en Goldman Sachs valorada en 3,3 millones de dólares, según ha informado el consejero delegado de la compañía, Edgard Liddy. Una participación que, en opinión de las autoridades estadounidenses, representa un conflicto de intereses.

El goteo de referencias empresariales llega a General Electric. El conglomerado industrial ha reducido un 35% su beneficio en el primer trimestre del año, hasta los 2.830 millones de dólares frente a los 4.470 millones de dólares del mismo período del año anterior. El propio presidente de la compañía, Jeff Immelt ha señalado que la compañía no necesitará ampliar capital después de anunciar que su filial GE Capital le ha llevado a reducir un 9% sus ingresos en el mismo período. Pese a ello, los títulos de la compañía se desploman un 3,42% y alcanzan los 12,27 dólares. Quien no ha logrado salvarse de las pérdidas en sus resultados es la juguetera Mattel. La compañía perdió 51 millones de dólares en los tres primeros meses del año afectado por la disminución de los inventarios de las firmas minoristas y los efectos derivados de la apreciación del dólar. Cifras ya descontadas por la compañía y que hoy con recibidas con más del 6% de revalorización.

En el tecnológico Nasdaq, todas las miradas apuntan a Google. El buscador de Internet ha visto decrecer su facturación durante el primer trimestre de 2009. Una bajada del 3% respecto al trimestre anterior, hasta los 5.510 millones de dólares. Sin ser ideales, las cifras de la compañía presentan un beneficio neto de 1.420 millones de dólares, desde los 1.290 millones de dólares registrados en el trimestre anterior, y consiguen que la compañía añada un 0,79% a su cotización.

Movimientos en el sector de la automoción

Todas las miradas del sector automovilístico fijadas en General Motors el día que dará los detalles de su proceso de reestructuración para reducir significativamente su nivel de endeudamiento. Y ello tras dos semanas de reuniones con representantes de la Casa Blanca y en medio de las especulaciones de que podrían estar presionándole para quedarse sólo con tres de las ocho marcas que posee en la actualidad. La compañía baja medio punto porcentual y cotiza en los 1,94 dólares por acción.. Hacia otra de las compañías de Detroit, Chrysler, estarán pendientes los inversores cuando el gobierno de Estados Unidos tendrá que designar – junto a Fiat- al nuevo consejo de administración de la compañía en caso de que fructifiquen las negociaciones de alianza entre ambas compañías.