JPMorgan Chase, Bank of America, Goldman Sachs y Morgan Stanley tienen o planean emitir un total de 40 mil millones de dólares en deuda, según informes de los medios. La venta de bonos de JPMorgan por 13 mil millones de dólares el 15 de abril fue brevemente un récord de la industria hasta que fue superada al día siguiente por la oferta de 15 mil millones de dólares de Bank of America.
Las entidades bancarias no han indicado el porqué de estas emisiones, pero los analistas coinciden que se debe a la confluencia de factores monetarios y regulatorios impulsados por el gobierno de Joe Biden a la espera del resurgimiento de la economía tras la pandemia.
“Ese repunte económico impulsado por el despliegue de la vacunación y billones de dólares de estímulo, combinado con tasas de interés ultrabajas ha creado excelentes condiciones de endeudamiento tras las estelares ganancias del primer trimestre”, afirma Schroeder.
Además también han ayudado las declaraciones de la FED de levantar las restricciones a la distribución del capital de los bancos que pasen la prueba de estrés en junio próximo. “Muchos también quieren tener suficiente efectivo disponible para mantener contentos a los accionistas con una mayor recompra de acciones”, destaca el analista.
"Vamos a recomprar una cantidad sustancial tan pronto como podamos", dijo a los analistas el presidente ejecutivo de Bank of America, Brian Moynihan durante la llamada de ganancias del banco antes de la venta de bonos.
Pero no todo lo que brilla es oro. A pesar de los estímulos, el gobierno también redujo el crecimiento de los préstamos provocando un aumento repentino de los depósitos en la FED y en bonos del Tesoro americano.
“Estos depósitos están creciendo como locos, pero los préstamos no y el capital común no, y eso crea un problema serio para los bancos”, dijo Dick Bove, analista de Odeon Capital Group.
Para algunos bancos esto es un problema regulatorio, ya que desde el 1ro de abril los bancos tuvieron que reanudar la retención de capital adicional contra bonos del Tesoro y depósitos de la Fed después de que el banco central puso fin al alivio pandémico temporal que había permitido a los prestamistas excluir esos activos de un cálculo clave de capital.
El índice de apalancamiento suplementario o SLR es una medida adicional introducida tras la última crisis financiera que exige a los bancos mantener efectivo para cubrirse contra activos independientes de su riesgo. Por lo que los aumentos de los depósitos suponen que los mismos estén buscando aumentar la deuda para operar con comodidad dentro de esa proporción.
"Es muy probable que la emisión de deuda haya sido impulsada en parte por el vencimiento del alivio de SLR", dijo Gennadiy Goldberg, estratega senior de tasas de TD Securities.
Con respecto a la venta de bonos de los principales bancos podemos destacar lo siguiente:
- Los ejecutivos de Bank of America dijeron en su llamada de ganancias del primer trimestre antes de la venta de bonos que todavía tenían espacio antes de alcanzar el umbral de su índice de apalancamiento. La venta de bonos tenía como objetivo principal el crecimiento comercial del banco, incluidas la recompra de acciones y la planificación de la resolución, según una persona familiarizada con el asunto
- Por su parte, la oferta de bonos de Morgan Stanley no habría sido impulsada por estas restricciones según personas conocedoras del asunto
- Goldman Sachs tampoco se pronunció al respecto
- La FED no ha hecho comentarios
- JP Morgan si emitió estos bonos debido a las restricciones mencionadas anteriormente según una persona conocedora del asunto. En su llamada de ganancias, los ejecutivos del banco señalaron que el crecimiento de los depósitos había aumentado su apalancamiento, lo que llevó a la directora financiera Jennifer Piepszak a criticar las reglas