A pesar de las correcciones en el sector de las criptomonedas, Ethereum acumula avances diarias, semanales y mensuales del 4,5%, 6,5% y 8% respectivamente. Sin olvidar que en lo que vamos del 2023 ha avanzado un 39,5%. Los inversores se preguntan hacia donde se dirigirá su precio en el largo plazo, según Simon Chandler en Crypto News.
Dado que Ethereum es posiblemente la moneda más fundamentalmente sólida del mercado, tiene todas las posibilidades de disfrutar de más ganancias a medida que avanza el año.
De hecho, con la próxima actualización de Shanghái y con la deflación de la moneda después de la fusión, podría haber un apuro en los próximos meses.
El gráfico de Ethereum está pintando una imagen alcista en este momento, con su índice de fuerza relativa (púrpura) saltando hasta 60, habiendo estado en una sobreventa de 30 hace unos días.
Además, el promedio móvil de 30 días de la moneda (rojo) ha comenzado a aumentar aún más por encima de los 200 días (azul), lo que indica el surgimiento de una nueva tendencia alcista.
Por supuesto, no está claro cuánto tiempo puede durar esa tendencia, aunque si Ethereum puede superar el nivel de resistencia de 1.700 dólares, las cosas pueden continuar un poco más.
Hay una buena posibilidad de que esto suceda, dado lo que Ethereum tiene en el horizonte.
Como se señaló anteriormente, actualmente está esperando la actualización de Shanghái, que vence a fines de este mes o principios de abril.
Shanghái permitirá el retiro de ETH apostado
Mientras que algunos han argumentado que la actualización resultará en un aumento de la presión de venta, otros han sugerido que el efecto a largo plazo será atraer a más inversores institucionales al ecosistema Ethereum.
La capacidad de retirar ether apostado será, en última instancia, positivo para la moneda, ya que elimina el riesgo de apostar para los usuarios, asegurándoles que sus fondos se pueden retirar fácilmente.
Al mismo tiempo, Shanghái también proporciona las bases técnicas para futuras actualizaciones de Ethereum, incluida la fragmentación, que proporcionará mejoras masivas de escalabilidad cuando entre en funcionamiento (muy probablemente el próximo año).
Esto ya es lo suficientemente optimista para Ethereum tal como es, sin embargo, hay otras razones para ser optimistas sobre las perspectivas de la altcoin.
Por un lado, la moneda se ha vuelto deflacionaria desde la fusión de septiembre pasado, en combinación con la actualización anterior de EIP 1559 (que resulta en la quema de tarifas).
De hecho, Ethereum ahora tiene una tendencia a volverse deflacionario durante los períodos pico de tráfico, ya que a menudo quema más tokens de los que genera.
Esto fortalece el caso alcista de Ethereum, pero también lo hacen las noticias de adopción recientes.
En particular, Coinbase anunció el mes pasado que está lanzando su propia cadena lateral de capa dos para Ethereum, denominada Base.
Lo significativo de esto es que Coinbase tiene como objetivo utilizar Base para "incorporar a más de 1B+ usuarios a la criptoeconomía". En otras palabras, su objetivo es incorporar a los usuarios 1B+ a la economía de Ethereum.
Esto solo puede aumentar el uso de Ethereum, y amplificando los efectos deflacionarios mencionados anteriormente, así como aumentando la demanda de ETH en general.
Otras noticias positivas para Ethereum incluyen el anuncio de febrero de Visa de que está probando los pagos de monedas estables de USDC en la cadena de bloques de Ethereum.
Tomado con las noticias de Coinbase, esto sugiere que la mayoría de las grandes empresas terminarán optando por Ethereum si deciden usar una cadena de bloques pública y sin permiso.
Como tal, el mercado puede esperar que Ethereum aumente de manera constante a lo largo del año, incluso si el próximo mes puede ser difícil debido a la crisis bancaria que se está desarrollando.
Aún así, una vez que Ethereum supere los 1.700 dólares, podría terminar alcanzando los 2.000 dólares en la segunda mitad del año, antes de aumentar potencialmente a 2.500 dólares a principios de 2024.
Ethereum cotiza en los 1.600 dólares al mediodía con un gap alcista y el cruce de la media móvil de 70 periodos por encima de la de 200 periodos nos daría una señal alcista.
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