Se está hablando en el mercado de que algunos inversores han perdido la fe en el oro como activo refugio, ya que no se ha apreciado durante la venta masiva de acciones de mercados emergentes. Sin embargo algo falla en este argumento cuando, en el mismo período, las acciones de los mercados desarrollados se hayan mantenido fuertes durante este período evidenciando que los inversores no estaban buscando activos refugio.
El pesimismo a día de hoy es excesivo y el oro podría tener un rally de corto plazo. “Nuestro caso base es que el oro podría acabar el año en torno a 1.270 dólares por onzda y escalar hasta los 1.320 dólares en el 3T de 2019, por encima de los 1.200 dólares en que cotiza actualmente".
El sentimiento del inversor, clave en el próximo movimiento del oro
Mirando más allá, “pensamos que el sentimiento será clave en el próximo movimiento del oro. El incremento de los tipos de interés normalmente arrastra al precio del euro. Pero, mientras esperamos que la FED suba una vez más los tipos en 2018 y dos en 2019, estos movimientos son ampliamente esperados y puestos en precio tanto por el dólar como por los bonos estadounidenses”.
Las bajas presiones inflacionistas podrían pesar algo sobre el oro. El dato de inflación de EEUU subió en julio al 2.9% pero hay factores que están jugando en contra de una aceleración de los precios: el hecho de que las ganancias del petróleo caen cuando se hace una comparativa interanual; los bajos precios de la agricultura y los altos tipos fiscales. Con todo, “esperamos que la inflación se modere al 2,4% en el tercer trimestre de este año”.
Y para el dólar, los riesgos son del lado bajista, lo que podría ser un soporte para el oro. Mientras no pensamos que las tres subidas de tipos de la FED sorprendan al mercado, hay un riesgo de que otros bancos centrales puedan endurecer su política monetaria. Esto, combinado con un crecimiento indudable en EEUU, exacerbado por el reciente impulso fiscal, podría reducir la presión sobre el billete verde.
Aunque de todo lo dicho, ninguno de estos factores podría mover demasiado al oro. Entonces, ¿qué podría cambiar el sentimiento sobre el metal precioso? Desde Wisdom Tree miden el sentimiento del inversor mirando las posiciones especulativas en el mercado de futuros del oro, que está en su nivel más bajo desde 2001. “Pensamos que el actual posicionamiento negativo es inusual, particularmente a la luz de los riesgos en el mercado”.
Como consecuencia, incluso en una recuperación de precios plana a moderada, algunas posiciones cortas se cubrirían. Esto tiende a ampliar las ganancias de los precios y podría poner en marcha un repunte.
Factores para recordar al inversor las cualidades defensivas del oro
Hay varios factores que podrían provocar un retorno del sentimiento del riesgo y recordar a los inversores las cualidades defensivas históricas del oro:
- La guerra comercial: No esperan un incremento del proteccionismo en EEUU para dañar la demanda económica global. Pero sí, por una cosa o por otra, escalan las medidas proteccionistas, el mercado podría reinstalarse en una mentalidad de venta.
- Negociaciones del Brexit: con la fecha límite en marzo de 2019 para la salida de Reino Unido de la Unión Europea, hay muchos detalles que se están ignorando. El fallo en las negociaciones de un acuerdo podría dañar tanto a Reino Unido como a la Unión Europea.
- Tensiones financieras: A pesar de los momentos de volatilidad que ha tenido el mercado este año, las acciones de los mercados desarrollados se han mostrado resistentes. Pero no haygarantía de que se vaya a mantener el optimismo en el próximo shock.
Como conclusión, dicen estos expertos,que cualquier escenario es posible. Aunque su caso “base” es que el posicionamiento en el mercado de futuros se restaurará a medida que se cubran las posiciones cortas, lo que llevará a los precios del oro a los 1.320 dólares por onza el próximo año.