Caixabank ha colocado, mediante el procedimiento de colocación acelerada, 4,18 millones de acciones, correspondientes al 5,01% que poseía en
BME. La venta se ha realizado por 124 millones, valorando cada título en 29,60 euros, un 3,74% por debajo de los 30,75 euros con los que cerraba la sesión de ayer.
Por ello, es normal que los títulos de BME hoy estén cayendo buscando igualar el precio al que ese paquete ha sido vendido. En concreto, la operadora de mercado se deja un 2,50% hasta los 29,98 euros, no obstante, no supone una degradación del título, puesto que no pierde la canalización alcista que arrancó en diciembre. De hecho, Gisela Turazzini, CEO de Blackbird, considera que esta corrección supone una oportunidad de entrada en el valor. Ahora, su soporte técnico se sitúa en 27,50 euros, resistencia que venía frenando su cotización desde 2008. Mientras esté por encima, BME es un valor en subida libre.
La desinversión de Caixabank le aporta a la financiera plusvalías de 47 millones, pero remueve las tripas accionariales de BME, revueltas de por sí en los últimos meses, pues recordemos que el pasado 7 de enero Santander elevó su participación en la operadora de mercado hasta el 3,4%, desde el 2,88% anterior. En cambio, en noviembre el Banco de España acabó de salir de la compañía, vendiendo el 5,335% -resquicios de cuando era pública- por 122 millones de euros y logrando unas plusvalías de 117 millones.