Gay señala que “invertir en renta variable norteamericana en 1982, cuando el desempleo alcanzó el 10,8%, los bonos del tesoro a 10 años estaban en el 14,5% y el IPC interanual estaba en el 8,3%, hubiera supuesto beneficiarse del mercado alcista que entre 1982 y 1987 fue uno de los mejores y más potentes de toda la historia. El contexto económico, con una creciente deuda en Estados Unidos, tenía semejanza con la situación actual. Este es un momento muy interesante para la renta variable norteamericana, sobre todo si se tiene en cuenta que las condiciones actuales son menos severas que las de la década de los '80 del pasado siglo".

Legg Mason Capital Management considera que la actual recuperación del mercado todavía tiene recorrido, y que debido a la severidad de la caída, la recuperación también podría ser más pronunciada de lo habitual. La gestora afirma que siempre existen cuatro condiciones en el inicio de un mercado alcista, y que todas ellas están presentes en Estados Unidos: Los beneficios tocan fondo, la economía se estabiliza y empieza a cambiar de rumbo, la Reserva Federal adopta medidas más tranquilizadoras y de estímulo económico, y las valoraciones se vuelven más atractivas.

"Al parecer, el mercado habría tocado fondo el pasado 9 de marzo – continúa Mary Chris Gay- y aunque después se ha notado una subida dramática en el valor de nuestra cartera y en el mercado en general, todavía hay bastante margen para crecer, porque todavía no hemos regresado ni siquiera a los niveles de hace nueve meses en cuanto a precios relativos".

El Legg Mason Value Fund cuenta con una estrategia de gestión centrada entre 30 y 50 valores. Invierte principalmente en grandes compañias norteamericanas, y está focalizado en empresas que cotizan con grandes descuentos respecto a su valor fundamental. En la actualidad, el fondo está centrado en valores tecnológicos, financieros y de consumo minorista.

El fondo ha tenido un rendimiento del 17,8% desde el 30 de junio de 2009 frente al 13,96% registrado por el S&P 500*.