Calma intensa, pero tremenda expectación. Ambas cosas se esperan en los próximos meses para la firma con sede en Redmond. Una vez que Steve Ballmer abandonó el barco para que fuera sustituido por Satya Nadella, se empiezan a vislumbrar pequeños cambios que les auguraría un futuro más sólido. Pero tiempo al tiempo y paso a paso. Todavía quedan muchas cosas por mejorar pese a las oportunidades que tienen ante sí.
Lo que está claro es que esas modificaciones en diversas áreas de negocio como la nube deben concretarse lo antes posible. Precisamente, Nadella antes de ser nombrado como CEO de
Microsoft era encargado del cloud computing, el sector más mermado del conjunto de la compañía. Pues bien, ése es el reto. El principal, vaya. Así se considera de puertas para adentro y de puertas para afuera.
Pero sí, se empiezan a palpar un aire fresco. Un devenir distinto. Muestra de ello es que desde el tan esperado nombramiento del nuevo máximo dirigente, las acciones de Microsoft han subido más de un 10% hasta hoy día, alcanzando su nivel máximo en los últimos 14 años. La cotización, entre otras cosas, había sido uno de los puntos flacos de Ballmer, de modo que ya es un importante tanto que puede apuntarse Nadella en su particular marcador.
Evidentemente, ahí no queda todo, puesto que un cambio del equipo directivo solo es la base. Desde arriba hasta abajo. La tecnológica necesitaba crear una nueva estrategia, sentar bases y así encarar su futuro más próximo. A partir de ahí se empezaría a desarrollar ya en lo que centrarse a largo plazo.
En este sentido, precisamente se ha dado a conocer un acuerdo de colaboración que ha llamado la atención a inversores y analistas. Se trata de un primer movimiento que ya indicaría que las intenciones de Microsoft son ambiciosas. Y es que la empresa fundada por Bill Gates habría alcanzado a un acuerdo para proveer a Apple. Concretamente, para que el Microsoft Office Suite pueda utilizarse en los dispositivos iPad.
Se trata de una operación sin precedentes. De este lanzamiento esperan que sea su producto más rentable al ser compatible con el sistema operativo de la tablet más famosa de Apple. Las condiciones se conocerán de forma inmediata, precisamente, en el debut de Satya Nadella en la que será su primera conferencia. (Ver: noticia)
Este acuerdo tendría tal dimensión que los expertos de Jefferies hicieron una encuesta que apunta que podría aumentar el precio de la acción entre 2 y 4 dólares por título. Creen que si Microsoft lo hace bien, con un buen resultado del nuevo Office, podría ser muy bien recibido por los usuarios de las tabletas de la enseña de la manza. De hecho, la firma hizo una encuesta entre 500 posibles clientes que afirman que pagarían por tener Office en su dispositivo móvil. (Ver: noticia)
¿Qué debe seguir mejorando? Los expertos de Morgan Stanley consideran que al margen se de que Windows sigue acaparando la mayoría del negocio de Microsoft y que capta la atención de muchos inversores, está “volcándose en sectores como el las tablets y los móviles, además de la expansión de otros negocios, como el de la nube, que ahora mismo es crítico”.
Así pues, los analistas de la citada entidad financiera expresan que “hasta ahora, la estabilización de la actividad principal y el crecimiento de los productos auxiliares ha creado una base sólida para las transiciones posibles próxima a Microsoft”.
Crecimiento esperado para Microsoft
Asimismo, se está observando en los últimos meses más demanda tanto de su Plataforma como el servicio (PaaS) que ofrece, además de las aplicaciones de Dynamics, Exchange Online y Office 365. Además, en la última conferencia se destacó el énfasis que tienen que poner en las últimas tendencias, como las redes sociales y el Big Data.
Expandiendo su área de negocio hacia estas dos áreas mantendría, según los analistas, un crecimiento superior a dos dígitos. Mientras Azure siga siendo una pequeña parte de los ingresos totales, podría recibir entre 1.000 y 2.000 millones de dólares del total de los ingresos en los próximos 3 años.
Por otro lado, hay otro factor del que Microsoft también pretende sacar réditos. Su apuesta por obtener una amplia facturación por Xbox One la han reflejado con su última estrategia para incrementar su demanda. El precio de la videoconsola se ha rebajado casi en 100 dólares hasta llegar a los 389 dólares, 10 dólares menos que su principal competidora, PlayStation 4, en un intento por captar más volumen de mercado.
En esta línea, y con estos desafíos que tiene la compañía ante sí, el conjunto de los analistas recomienda en un 34% comprar las acciones de la compañía, mientras que el 58% restante prefiere mantener en cartera y el 8% restante vender. El precio objetivo medio lo ubican en torno a los 39,51 dólares.