No podemos recordar las veces que desde el Banco Central Europeo se ha pedido a los políticos de cada país que hagan los deberes porque la recuperación no es una cuestión de política monetaria y algo que tememos todos es que en el momento en que el Banco Central Europeo tenga que retirar los estímulos, todos aquellos países que no hayan hecho los deberes, pasarán dificultades muy grandes. Volver a las dificultades económicas en un momento en donde el populismo aprieta el acelerador, poder tener consecuencias muy drásticas para la organización geopolítica del viejo continente.

Todos sabemos que los tipos de interés han bajado en la zona euro gracias al programa cuantitativo que comenzó hace no demasiado tiempo y además por la constante bajada de tipos de interés junto con los tipos negativos. Este colchón de dinero ha tenido consecuencias muy potentes, y no en sentido positivo precisamente, para los ahorradores y los inversores más tradicionales a los que no les gusta nada el riesgo. Eso puso en el punto de mira a la sociedad alemana, aunque hayan sido ellos precisamente uno de los países más beneficiados por poder financiarse prácticamente gratis a plazos realmente importantes como son por ejemplo 10 años.

Hasta el momento, los comentarios desde el BCE acerca de lo que significa para la recuperación sus estímulos, han sido más bien muy ligeros y midiendo mucho las palabras, pero sin embargo ahora no se han cortado un pelo y han dicho claramente que la recuperación de la zona euro depende directamente de la política monetaria expansiva que se está llevando a cabo que hace que dinero sea barato. El ser tan directo debería tener consecuencias en todos los países, porque prácticamente, a buen entendedor pocas palabras bastan, está diciendo que la recuperación la está creando él y no los gobiernos de los países. Aquellos que tengan un poco de amor propio se sentirán aludidos.

Ha hablado en un Congreso bancario en Frankfurt y también ha dicho que las medidas que se han aplicado se están transmitiendo bien, apoyando tanto la inflación como el crecimiento. Sin embargo, advierte que la inflación sigue siendo baja y también advierte acerca de la baja rentabilidad de los bancos.

Considera que no pueden bajar todavía la guardia, así que seguirán actuando utilizando todos los instrumentos que tengan disponibles hasta que el aumento de la inflación sea sostenible. Por lo tanto, parece que vamos a tener una extensión de todas las medidas el mes que viene precisamente porque el cambio de gobierno en Estados Unidos está favoreciendo justo lo que quieren evitar, que suban los tipos de interés para seguir apoyando la recuperación y además es que no ven una recuperación consistente de la dinámica de los precios, precisamente porque son conscientes de todo lo que ellos están haciendo para mejorarlos, un factor más para seguir apoyando toda la estructura que se ha creado.