El consejero delegado de Merlin Properties, Ismael Clemente, obtuvo una remuneración total de 7 millones de euros en 2021, un 55% más que en 2020, gracias a la aportación de la retribución variable a corto y largo plazo.

En concreto, al sueldo de un millón de euros se le sumaron 900.000 euros por la remuneración variable a corto plazo, que no recibió en 2020, y otros 4,6 millones de euros por la variable a largo plazo, un 31% superior a la de hace un año.

Asimismo, percibió otros 375.000 euros por un incentivo extraordinario que tiene en cuenta el valor absoluto de la acción, según consta en la información remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

El director general corporativo, Miguel Ollero, en su calidad de consejero ejecutivo, también recibió una remuneración similar, de 6,5 millones de euros, gracias los mismos conceptos variables e incentivos, aunque el de a corto plazo fue menor, lo que explica la diferencia.

En total, la retribución de todo el consejo de administración fue de 15 millones de euros en 2021, lo que supone un incrmento del 50% respecto a los 10 millones de 2020.