El cáncer de pulmón es el tumor más frecuente en el conjunto de la población y el que causa mayor número de muertes en el mundo. En España, se estima que cada año se diagnostican más de 30.000 nuevos casos, siendo el de mayor incidencia y tasa de mortalidad, situando su supervivencia en torno a un 15%. Ante este contexto y en el marco del Día Mundial Contra el Cáncer de Pulmón, que tiene lugar este viernes 17 de noviembre, Quirónsalud Zaragoza quiere concienciar a la población de la importancia de los hábitos de vida saludables, siendo fundamentales dejar de fumar y el ejercicio físico. Asimismo, la implementación de un programa de detección precoz es clave para un diagnóstico temprano de la enfermedad.
Para la doctora Pilar Rivero Sobreviela, responsable de tumores torácicos en el Instituto Oncológico del centro hospitalario, recalca que “una de las dificultades con respecto a este cáncer es que la mayoría de los casos presentan sintomatología en fases avanzadas, de ahí que el diagnóstico sea tardío en una proporción elevada de pacientes, de hecho tan solo en torno a un 25% de quienes lo sufren son detectados en estadios iniciales. De tal forma que, la fase en la que se identifica la enfermedad tiene una relación directa con el pronóstico de la misma”. “Existen varios estudios en marcha -continúa la especialista-, de cara a valorar la implementación de un cribado poblacional con el fin de detectarla en estadios precoces, permitiéndonos ofrecer tratamientos con intención curativa a nuestros pacientes y mejorar su supervivencia”.
En cuanto a los síntomas, hay que prestar atención a determinados signos como la tos seca persistente o con expectoración sanguinolenta, la sensación de falta de aire, el dolor torácico, la afonía persistente, la pérdida de peso no intencionada y la cefalea constante.
Algunos desencadenantes de esta enfermedad
Entre las principales causas se encuentra el tabaco, principal factor de riesgo del cáncer de pulmón. El 90% de los nuevos casos se detectan en pacientes fumadores o que han abandonado este hábito recientemente. “Dependiendo de la cantidad de consumo diario, las personas fumadoras tienen entre 10 y 20 veces más de riesgo de desarrollar este tipo de tumores frente a quienes no fuman. En este sentido, es importante señalar que solo con la eliminación de este hábito entre la población podrían reducirse 30 de cada 100 nuevos casos”, aclara la doctora. “Por este motivo, en Quirónsalud Zaragoza tratamos de facilitar al paciente un soporte integral adecuado y, en especial, una ayuda si se plantea dejar de fumar”, aclara el doctor Carlos Muñoz Montano, especialista en radiodiagnóstico en el Instituto Oncológico del centro hospitalario.
Igualmente, existen otros factores de riesgo como el radón, considerado por la Organización Mundial de la Salud la primera causa en no fumadores y la segunda en quienes sí lo consumen; el arsénico, que puede estar presente en el aire, agua o tierra de forma natural o derivada de procesos agrícolas e industriales; la contaminación ambiental, la edad, algunas patologías respiratorias preexistentes como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica o factores genéticos.
Abordaje integral y técnicas avanzadas de diagnóstico
El Instituto Oncológico Quirónsalud Zaragoza ofrece la tecnología más innovadora y un exclusivo modelo de atención integral con el fin de aumentar la esperanza y calidad de vida de los pacientes y lograr una detección más temprana. A este respecto, el grupo hospitalario hace hincapié en la importancia de un diagnóstico precoz al ser clave, junto con la terapia individualizada, para hacer frente a esta enfermedad. “Contamos con unidades de diagnostico rápido, sobre todo de cara al inicio del tratamiento. De tal forma que ponemos especial énfasis en este tipo de pruebas que nos ayudan a detectarlo, como la técnica Endo Bronchial Ultra Sound (EBUS) o ecobroncoscopia, tanto lineal como radial, y más novedosas como la criobiopsia transbronquial mediastínica guiada por ultrasonido endobronquial (CRIO-EBUS)”, señala el doctor.
Además, con cada paciente se lleva a cabo un trabajo interdisciplinar y coordinado que permite acortar los tiempos de diagnóstico, ofrecer un asesoramiento sobre los posibles opciones e instaurar, con mucha prontitud, el tratamiento que el equipo médico considera más adecuado para la salud de la persona. “Este tipo de atención integral pivota sobre los comités de tumores: encuentros periódicos en los que intervienen tanto los miembros de las distintas unidades multidisciplinares como los de las áreas de apoyo o de los diferentes servicios hospitalarios. Gracias a esta metodología, se pone al servicio de la persona todos los recursos disponibles desde los distintos enfoques de cada especialidad, atendiendo a su situación y necesidades particulares”, concluye el especialista.