“Tras el referéndum nos encontraremos con una negociación diferente y lo mejor sería que los griegos dijeran que ‘sí’ para luego llegar a un programa de ayuda de unos tres años y hablar en serio sobre una nueva reestructuración de la deuda.


En este asunto, se pueden reducir intereses y llevar vencimientos hasta dentro de 15 a 20 años para quitar presión sobre su economía en estos momentos. Cuando se habla de reestructuración parece que todo el mundo piensa en quitas, pero no tiene por qué ser así.


Si el lunes sale un ‘sí’ se reabrirá la Bolsa de Atenas y podría producirse una situación similar a la de Chipre. Tampoco se están viendo niveles de volatilidad muy elevados. Y no se está descontando que el euro esté en riesgo porque está en el nivel de 1,11. Técnicamente da la sensación de que hay un despiste que no se sabe qué hacer. Hoy habría que vender un poquito para comprar el lunes en el caso de que los griegos digan que ‘sí’ el domingo”.



*Declaraciones a Radio Intereconomía