Tras esta adquisición, Abertis alcanza el 100% de la propiedad de la concesión, en línea con su estrategia de incrementar el control sobre sus participaciones, que se ha ido desarrollando en los últimos años. En 2015, Abertis adquirió el control de las chilenas Autopista Los Libertadores y Autopista del Sol. Con la incorporación de Autopista Central, Abertis ya controla el 100% de las 6 concesiones que tiene en el país.
Por otro lado, la adquisición del 50% restante de Autopista Central, cuya concesión expira en 2031, supone la extensión del vencimiento medio de la cartera local de activos de Abertis hasta 2027.
Tras la compra, Autopista Central se consolidará de manera global en las cuentas de Abertis con un impacto estimado anual aproximado de 220 millones de euros de ingresos; 160 millones de euros en Ebitda; y 400 millones de euros en deuda neta.
De esta manera, Abertis duplica el tamaño de su negocio en Chile, que se convierte en su tercer mayor mercado en términos de Ebitda, por detrás de Francia y España, lo que representa un 11% del total del Grupo.
El Vicepresidente y Consejero Delegado de Abertis, Francisco Reynés, ha destacado la importancia de esta operación para el Grupo puesto que “demuestra la capacidad de Abertis para incrementar su base de activos en condiciones atractivas, y supone un paso más en el cumplimiento de los compromisos establecidos en nuestro Plan Estratégico 2015-2017”.
También ha subrayado la relevancia de Chile para Abertis, “uno de los mercados de concesiones más atractivos del mundo, con un marco regulatorio claro, estable y consolidado, y la mayor tasa de PIB per cápita de la región. El país andino es una pieza clave en la estrategia del Grupo y en su apuesta por la generación de valor a largo plazo para sus accionistas, sus clientes y toda la sociedad”.
La operación permitirá a Abertis reforzar su posición financiera así como la generación de sinergias con el resto de sus activos en el país.
Descripción del activo
Autopista Central, una concesión de 61 kilómetros de longitud, es la autopista más importante de Chile y la vía más transitada del país con una Intensidad Media Diaria de 81.037 vehículos (septiembre 2015). Su periodo de concesión se extiende hasta 2031.
La infraestructura discurre por el centro de la ciudad de Santiago de Chile a través de dos ejes principales: el eje Norte-Sur tiene una extensión de casi 40 kilómetros y cruza 10 distritos de la ciudad desde Quilicura en el norte hasta el río Maipo en el sur; mientras que el eje General Velázquez tiene 20 kilómetros de longitud y cruza nueve distritos. Es la mejor alternativa vial para el tráfico entre el norte y el sur de la ciudad.
Autopista Central cuenta con una moderna tecnología de peaje sin barrera o “free flow”, que permite el flujo libre del tráfico.