El jefe del Ejecutivo señaló por otra parte que la desaparición de la tarifa nocturna, que tendrá lugar en julio, no "puede ni debe suponer" subidas adicionales de la luz, ya que se integrará en la nueva tarifa de discriminación horaria, que aunque está dando "algunos problemas" de aplicación, Industria trata de resolverlos con las compañías eléctricas. El Ministerio de Industria estudia introducir criterios de renta y tener en cuenta a determinados colectivos, como los pensionistas, para definir nuevas opciones dentro de la tarifa eléctrica y minimizar el impacto de la previsible subida de julio en los consumidores, según informaron ayer fuentes de este departamento.En su réplica, Francisco Jorquera pidió a Zapatero que fuese más explícito en su explicación y que aclarase si va a seguir con la política de acordar incrementos anuales de la luz en línea con la inflación.El Gobierno tiene la potestad para revisar las tarifas eléctricas cada tres meses. Sin embargo, en 2007 y 2008 sólo ha incrementado la luz en enero y por debajo del IPC, un 2,8 y un 3,3%, respectivamente.Jorquera pidió a Zapatero que no tome decisiones que "castiguen" el poder adquisitivo de los ciudadanos, y consideró que la situación actual, con una inflación "galopante", no es la más apropiada para decretar subidas de la luz y eliminar la tarifa nocturna.Sobre esta última cuestión, Zapatero señaló que su desaparición, que será efectiva a partir del 1 de julio próximo, y la aplicación de la nueva tarifa de discriminación horaria, no "puede ni debe suponer" subidas adicionales de la luz.El presidente recordó que la modificación de la tarifa nocturna obedece a la trasposición de una directiva europea, que obliga a integrarla en la nueva tarifa de discriminación horaria.Según explicó, la discriminación horaria amplía las horas en las que se aplican descuentos a la electricidad, lo que, según sus cálculos, "va a beneficiar a un número mayor de consumidores" y supondrá una "reducción del 2 o del 2,5%" en la factura.La Unión de Consumidores de España (UCE) señaló ayer, por el contrario, que estos cambios supondrán subidas de entre el 25 y el 80% para los consumidores, y advirtieron de que el recargo por el consumo fuera de las horas en las que se aplica el descuento pasa del 3 al 35%.José Luis Rodríguez Zapatero reconoció que la aplicación de la tarifa de discriminación horaria está teniendo algunos problemas en algunas comunidades autónomas.No obstante, aseguró que el Ministerio de Industria está "intentando aclarar" la aplicación del nuevo modelo.