En concreto, la actividad económica de la zona euro se mantuvo estable en el cuarto trimestre de 2009 respecto a los tres meses anteriores, mientras que en términos interanuales registró un retroceso del 2,2%. Además, en el conjunto de 2009, el PIB de la eurozona registró una contracción del 4,1%, frente al retroceso del 2,4% en EEUU y del 5,2% en Japón.

Por su parte, el volumen de ventas minoristas en la zona euro registró en febrero un retroceso de seis décimas respecto al mes anterior, cuando había caído un 0,2%, mientras que en términos interanuales el descenso fue del 1,1%, lo que siembra más dudas sobre la fragilidad de la recuperación económica en el bloque del euro.

En este sentido, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) advirtió ayer de que dicha recuperación registrará un menor ímpetu en la eurozona que en otras grandes economías como EEUU o Reino Unido, especialmente por el debilitamiento de Alemania, que incluso experimentó una recaída del 0,4% de su PIB en los tres primeros meses de 2010.