Este hecho, no sólo ha tranquilizado a los inversores, que vuelven a apostar por los mercados de renta variable,
sino que además está fortaleciendo a la divisa europea, cosa que no gustará nada al presidente de la República francesa, Nicolas Sarkozy, quien afirmaba recientemente que la moneda europea estaba en niveles excesivamente altos.


La divisa común, que cerraba la semana anterior en niveles de 1.35 dólares ya cotiza en 1.37 y nada parece indicar que dicha tendencia pueda detenerse, al menos en el corto plazo.


Cotización EUR/USD durante los últimos cinco días