Europa se enfrenta a un segundo trimestre plagado de dificultades. “La clase media no nos salvará esta vez”,
comenta Andrade a colación de la evolución dispar que experimenta la deuda neta de los países de la eurozona en contraposición con el ahorro de las familias, claramente en picado. De hecho, considera que, desgraciadamente, “no existe un solo gráfico positivo”.
Si bien es cierto que el experto coincide en que Eslovenia, en base a fundamentales, es el país que cumple todos los requisitos para ser rescatado después de Chipre, no niega que Portugal se encuentra también la picota junto a Malta. Desde Saxo Bank rebajan hasta la zona en negativo las previsiones de crecimiento de la Unión Europea de cara al 2013 dado que si la versión oficial habla de tasas positivas para el PIB de la eurozona de un 0,4%, la gestora reduce este porcentaje al -0.5%. De igual modo, en su opinión, Estados Unidos crecerá un 1,4%, frente al 2% concedido por el FMI. Y reducen el crecimiento a nivel mundial hasta una tasa del 2,1% debido, entre otros, al pronóstico de un avance del 7% del PIB de China, frente al 8,1% esperado por el gigante asiático.
La fuerza laboral es uno de los aspectos a tener en cuenta y los datos son ciertamente desalentadores. Según el consenso de analistas de Saxo Bank, el crecimiento de la población activa en Estados Unidos hasta el año 2050 aumentará un 42%. La cruz se la lleva Europa con una caída del 25%, sólo por delante de Japón, con un desplome del 44%. China, por su parte, verá reducir su población activa en un 11%. “La curva es claramente favorable a Estados Unidos”, afirma.
“Los europeos se empeñan en invertir en renta variable comunitaria cuando cualquier inversor debería tener, al menos, un 60/70% de su cartera invertida fuera, en Estados Unidos, China o el resto del mundo”, asegura Manuel Andrade.
Ante estas previsiones, Saxo Bank entiende que los gobiernos europeos pasarán a adoptar una política del ‘free rider’, esto es, dejarse llevar por el ciclo de los acontecimientos y cruzar los dedos para que la situación no empeore más. En todo caso, el foco se centra en los últimos meses sobre Francia. El propio experto reconoce que las finanzas galas atraviesan un momento crítico, pero, dado que “representa el 20% de la economía de la eurozona, un rescate a París es totalmente impensable. Es algo que no sucederá”.
Renta variable: Ibex 35, DAX & S&P500
“Nos mantenemos negativos desde hace cuatro años”, afirma. Y la opinión no ha cambiado. Andrade, natural de Portugal, entiende a la perfección la situación de incertidumbre con la que viven diariamente los inversores de la periferia europea. “Un inversor quiere transparencia y eso es algo que no tenemos ni en España, ni en Italia, ni en Portugal. No sabemos dónde va a estar el próximo regalo en los periódicos el fin de semana”, comentaba el analista a colación de la última ‘sorpresa’ sobrevenida de manos de Pescanova.
Reconoce que el selectivo español sigue al Dax históricamente, aunque concede un mayor potencial alcista a las bolsas del sur de Europa, pese a que se deberá a “cuestiones tácticas y no en base a su valor”. Existe un diferencial del 10% entre el comportamiento del Ibex y del Dax en lo que llevamos del año con un crecimiento del índice germano del 3,17% frente a una caída del 7,60% de la bolsa española. Ahora bien, la excepción viene protagonizada por Chipre dado que si su situación se mantiene en el tiempo, “el Ibex 35 sufrirá”.
La tendencia a la baja puede extenderse, asimismo, a Estados Unidos. Andrade prevé que el S&P 500 alcance los 1.570 puntos, aunque advierte de un comportamiento revelador por parte de los ‘insiders’. “Los CEOs de las compañías del S&P 500 están vendiendo sus acciones con lo que creemos que el mercado caerá en los próximos tres meses. Claramente, los ejecutivos consideran que es tiempo de salir”.
Divisas: el euro/dólar en el 1,18
El cuadro facilitado por Saxo Bank muestra a un euro cada vez más débil respecto al dólar en base a criterios macroeconómicos. Desde la gestora consideran que la economía estadounidense está llamada a recuperarse debido a dos datos fundamentales: la caída del desempleo y el aumento de la venta y construcción de vivienda como factor a tener en cuenta en la recuperación del mercado inmobiliario. La previsión para el próximo trimestre es un euro/dólar en el nivel del 1,23 que daría paso a cotas más bajas de cara a la temporada estival en los 1,18 al cambio. De hecho, a un año vista conceden una cota para este par en los 1,12. “Un euro más bajo es muy positivo para España y Portugal porque nos ayudará a salir de la crisis”, confiesa Manuel Andrade.
Además, se espera una importante caída del cruce dólar australiano/dólar americano hasta llegar al nivel del 0,80 el próximo año, aunque resalta que su evolución “está supeditada a la cotización de las materias primas”.
Respecto al yen, la gran divisa del momento, Manuel Andrade considera que el BoJ ha llevado a cabo “una intervención excesiva. La tendencia durante los tres próximos años espera un yen más débil”. La previsión en su cruce con el euro otorga una cota del 117 en su cambio para el próximo trimestre y de los 95 yenes si hablamos sobre su cruce con el dólar.
¿Dónde invertir?
En terreno de Forex, desde Saxo Bank se mantienen cortos en la libra, dólar australiano y dólar canadiense y largos, sin embargo, en el dólar estadounidense.
A nivel de futuros, las posiciones son bajistas respecto al Cac 40 parisino o la bolsa germano, todo ello “mediante opciones”, y largos, por el contrario, en bonos, letras americanas a diez años y en el bono australiano. Asimismo, están alcistas en el oro para el que Andrade concede un potencial hasta los 1.800 dólares la onza. El cobre comparte su tendencia alcista en una correlación directa respecto al metal dorado.
“Para los más exóticos”, decía el experto, la apuesta pasa por Sudáfrica, empresas mineras de oro, el aluminio, las compañías de seguros y el trading en energía.
Y en lo que respecta a las “jugadas políticas”, la recomendación pasa por infraponderar Francia, mantenerse al margen de Italia y estar muy atentos a “las elecciones del 22 de septiembre en Alemania”, así como “a la profunda depresión por la que atraviesa el Este de Europa”.