Metrovacesa atribuye el resultado a la depreciación de su cartera de activos, que supone un impacto negativo de 308 millones de euros, y a los costes financieros, que restaron otros 137,1 millones.


Los ingresos de la inmobiliaria cayeron un 13% entre los pasados meses de enero y septiembre, hasta los 442 millones de euros.


Metrovacesa podría unirse al grupo, cada día más abultado, de las compañías que se lanzan al mercado de renta fija para refinanciar su deuda. La inmobiliara no descarta realizar una ampliación de capital mientras continúa negociando con sus entidades financieras acreedoras la refinanciación de este pasivo.