El fantasma del deterioro en la economía subyacente se sumaba al nerviosismo de los inversionistas, mientras Wall Street esperaba a que un plan de rescate financiero de 700.000 millones de dólares sea ratificado por la Cámara de Representantes el viernes, tras su aprobación por el Senado. El mercado acaba de recibir los datos de pedidos por subsidios de desempleo semanales, que registraron un nuevo incremento, al elevarse a 497.000 solicitudes, por encima de las 496.000 anteriores, y sobre todo, superando con creces las 475.000 esperadas por los analistas. Ahora, los inversores deberán esperar hasta la apertura para conocer las cifras de pedidos de fábrica del mes de agosto. La cautela es la tónica dominante respecto a este dato, después del varapalo que supuso ayer el descenso en las cifras del índice manufacturero.Hasta hace pocos minutos,
los inversores también miraban de reojo la reacción de los mercados europeos a la decisión del Banco Central de mantener los tipos de interés en el 4,25%. De momento, el euro sigue perdiendo terreno frente al dólar y el precio del crudo continúa también la senda bajista con descensos cercanos al 1,50 dólares hasta los 97,24 dólares el barril tipo West Texas.
