Así, consideraron "fundamental" evitar que los repuntes de los precios de las materias primas, sobre todo del petróleo, se trasladen a los precios internos y generen una espiral precios-salarios que deterioraría "aún más" la competitividad de la economía española y podría provocar un "problema serio" de suspensiones de pagos y desaparición de empresas. Además, para las Cámaras, es "esencial" crear políticas que reduzcan el "elevado diferencial" de precios con la zona euro, orientadas a ligar la evolución de los salarios a los incrementos de productividad y a evitar la posibilidad de que se forme una espiral precios-rentas.