Una vez más la clave estará en el discurso. El presidente de la Reserva Federal no ha sorprendido al mantener en el 0-0.25% el precio del dinero –nivel en el que se encuentra desde el pasado diciembre – dejando algo más tiempo al saneamiento y recuperación de la economía. Una decisión que sigue al dedillo las previsiones de los analistas que fijan 2010 como fecha en la que la entidad comenzará a ‘radicalizar’ su política monetaria. Para Álvaro Blasco, director de Atlas Capital: “el dato de inflación implícita en Estados Unidos dentro del crecimiento ha sido suficientemente bajo como para alejar ese miedo de que en los primeros meses del año pudiéramos ver un cambio de sesgo en los tipos”.
Diego Escribano, gestor de Fortis Banca Privada admite cree que “para hablar de subidas de tipos habría que penar en agosto del próximo año” y para quitar las medidas de estímulo “lo harán sólo si el sistema financiero está bastante consolidado”.

Sin embargo, no es una apuesta de cien a uno. Son muchos los expertos los que advierten de que los datos económicos de Europa y Estados Unidos son todavía ambiguos. La demanda sigue débil y las concesiones de créditos todavía están restringidas. Y recuerdan que las recientes subidas de tipos en los Bancos centrales de Noruega y Australia suponen un alabonazo pues, tarde o temprano, el dinero tendrá que subir.

¿Quitar medidas? Poco a poco

Y aunque por ahora no será….lo que sí que serán efectivas serán las palabras de Ben Beranke. José María Manzanares, director de productos y mercados considera que “algún día tendrán que quitar las medidas de ayuda” y orientar al mercado “pues ha sido tanto el dinero que se ha inyectado al mercado que asusta pensar en seguir adelante con estas medidas”. El jueves pasado finalizó el programa de recompra de deuda pública a largo plazo en el que se han invertido 300.000 millones de dólares. Felix González, socio director general de Capitalia Familiar admite que es momento de ir allanando un clima para pensar poco a poco en retirar las medidas de estímulo”. Y ver si el enfermo es capaz de caminar solo.

Este experto recuerda que “el mercado enfermo se apoyó en dos muletas – tanto las medidas expansivas como las ayudas fiscales – pero ¿será capaz de caminar sólo? Damian Querol, director de análisis de Banco Gallego admite que “hay que tener cuidado con esto pues provocaría una caída en el mercado…y de nuevo aparecerían los miedos”.