Si bien, Indra confía más en la expansión internacional y vaticina que este año el mercado nacional tendrá un comportamiento ligeramente negativo.


La compañía pretende cumplir con un margen EBIT de al menos el 10,5%.


Además, Indra prevé cerrar el ejercicio 2010 con los objetivos cumplidos, entre los que destacan un aumento del 7% de la contratación, superando el objetivo inicial del 5%. La contratación internacional alcanzará el 44% del total, creciendo un 23%; la contratación en el mercado doméstico ha descendido un 3%.

La compañía ha comunicado que mantiene su política de retribución a los accionistas y que el dividendo en 2011 será, al menos, igual al del ejercicio pasado.