En concreto, la renovación de los contratos afecta a las empresas Cabelte, que tiene una fábrica en Oporto y seguirá suministrando a Iberdrola cable de baja tensión y cable desnudo por unos 2,5 millones de euros anuales; y Solidal, del grupo Quintas&Quintas y con fábrica en Braga, que proporcionará cable de alta tensión y cable desnudo por 1,2 millones de euros al año.