Una de cal y otra de arena. Si la parte fundamental da alas a Gamesa, en lo que respecta al mercado no parece haber consuelo. Este mismo jueves, el Comité Técnico Asesor del Ibex 35 se reunía para decidir, entre otras cosas, la salida de Gamesa –y también de Sacyr Vallehermoso- del selectivo debido a su escaso volumen de negociación. A falta de noticias oficiales, en caso de que se cumpliera el pronóstico no sucedería hasta el próximo mes de mayo.

El último capítulo de Gamesa de este mismo viernes es la suspensión de cotización por parte de la CNMV tras el anuncio de su acuerdo en Estados Unidos con la compañía eléctrica canadiense Algonquin por un valor aproximado de la operación de 900 millones de dólares para la venta de cuatro parques eólicos por una potencia total de 480 megavatios (MW).



La operación se enmarca en la estrategia de Gamesa de puesta en valor de su cartera de parques en el mundo, que asciende a 31 de diciembre a más de 23.891 MW.

Supondrá para las arcas de Gamesa un incremento en su EBIT de unos 26,5 millones de euros dentro de una estructura de capital ('cash equity') e inversión fiscal ('tax equity') en la que interviene la eléctrica canadiense, JP Morgan y Morgan Stanley.


¿Sigue Gamesa en caída libre?
En principio sí, a todas luces. Ya hablábamos en la revista mensual de Estrategias de Inversión sobre su affaire con los cortos. Era la tercera recomendación dentro de las energéticas para entrar cortos. A los que estén “pillados” en ella les queda un aún desierto por caminar puesto que es un título en el que faltan ganas de rebote: escasa fuerza = posiciones cortas garantizadas. Antonio Sáez del Castillo, presidente de Gesmovasa, asegura que “hay un rebaño que sigue globalmente bajista como es el caso de Gamesa o Sacyr Vallehermoso, que son todo posiciones cortas.”


El desplome bursátil que acumula desde el año 2008 hace ver a la compañía en ocasiones como oportunidad de compra, según Eduardo Faus, analista de Renta 4. “Si hace unas semanas comentábamos las similitudes en diferentes escalas temporales de la situación técnica en 2008 (cuando tras cinco meses efectuando soporte en 10 euros cayó a niveles de 8 euros antes de un rebote de un 140% en los siguientes meses), hoy tratamos de efectuar un análisis de ondas que corroboran aquel escenario alcista de cara a 2012. El precio parece parar en la zona de la base del canal bajista desde 2009 y presumiblemente haría un suelo importante en el tiempo antes de 2,1 euros”, concluye.

En este sentido, Eduardo Vicho, director de Análisis de M&M Capital Markets, incide en la teoría de caída libre para el valor, aunque hace de la necesidad, virtud a la hora de conseguir el mínimo beneficio. “Tenía soporte en 2,90 euros pero, una vez perdido, la caída ha sido vertical”, comenta. “No obstante, los principales osciladores técnicos nos están indicando sobrecompra, por lo que podría rebotar hasta la zona de soporte aunque, cualquier acercamiento a éste, sería razón suficiente para deshacer posiciones.”