Esto se ha unido a la decisión de algunos países de sacar crudo de sus reservas, lo que ha hecho caer el petróleo por segundo día consecutivo. La diferencia entre el West Texas
y el Brent ha caído por debajo de los 15 dólares, desde los 19 del miércoles. Ésta se ha contraído desde su record en 23,34 dólares que alcanzó el 15 de junio.
Mientras tanto, el euro ha caído frente al dólar, ya que los inversores están preocupados ante la posibilidad de que el Parlamento griego no apruebe el plan de austeridad necesario para que el país asegure el fondo de rescate.


"El fortalecimiento del dólar está ayudando a presionar sobre el crudo y lo que estamos viendo es una corrección de la relación Brent-WT, debido a la liberación de reservas estratégicas” ha declarado Phil Flynn, analista de PFGBestResearch en Chicago.

En Londres, el crudo Brent para agosto ha caído 3,41 dólares para negociarse cerca de los 104,38 dólares el barril, después de haber volver de un rebote desde los 108,70 dólares, según informa la CNBC. El barril de referencia en Estados para entregar en agosto cae 0,18 dólares y se sitúa en los 90,84 dólares.

La decisión de la Agencia Internacional de la Energia se produjo después de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo no llegara a ningún acuerdo el mes pasado sobre un aumento de la producción. Sin embargo, Arabia Saudita se comprometió a aumentar la producción para satisfacer la demanda.

"Arabia Saudí será crucial, ¿cumplirá su promesa de aumentar la producción a 10 millones de barriles diarios o no?” se ha preguntado Carsten Fritsch, analista de Commerzbank en Francfort.

"Si no lo hacen, entonces la decisión de la AIE han fracasado. Tal vez den marcha atrás a la producción en julio después de la liberación de reservas” ha añadido.