Parece que la inyección de 50.000 millones de euros que recibió hace unos meses no ha sido suficiente para parar la hemorragia deficitaria del país.

En próximas horas se dará a conocer la cuantía que estas organizaciones prestarán a Irlanda, si bien, se baraja un monto de alrededor de 100.000 millones
para el gobierno que, a su vez, prestaría a sus bancos. SegúnFélix González, socio director de Capitalia Familiar EAFI, esta ayuda “va enfocada a reducir la dependencia de la economía Irlandesa al banco central y a reequilibrar los balances financieros del país.”


El Ecofin (Ministros de Economía y Finanzas de los 27 estados miembros de la Unión) tendrán la última palabra, pues deberán aprobar esta tarde-noche en Bruselas dicho rescate, pero todo apunta a que esto será puro trámite ya que en los últimos días varios responsable económicos europeos han abogado por este plan de rescate para evitar el efecto dominó sobre el resto de economías de la Eurozona, y sobre todo, sobre los países periféricos, como España.

De hecho, como publica el ABC, algunos grupos constructores y bancos españoles se verían seriamente afectados por la quiebra de Irlanda pues, en total, las constructoras españolas presentes también en el país sajón poseen contratos allí por un valor aproximado de 14.000 millones, mientras que casi 7.000 millones están ligados a créditos de la banca española concedidos a los sectores públicos de ambas administraciones. La entidad de Botín, el Banco Santander, sería la que más tendría que perder, con 5.134 millones de euros, mientras que Banco Popular tiene 657 millones invertidos en Irlanda.

Esta tarde el diferencial entre el bono irlandés a 10 años y el alemán se disparaba hasta los 559 puntos básicos. Aunque, según apunta Daniel Pingarrón, analista de IG Markets, "la relajación de los spreads de la deuda vendrá con un plan de rescate de Irlanda".

También la cotización de la moneda única europea se ha visto afectada. El euro dólar cede hasta los 1,348 dólares.