El IBEX 35 ha cerrado con un descenso del 1,06% hasta los 9.265,80 puntos. El selectivo madrileño se deja un 2,41% en la semana tras encadenar cuatro sesiones en rojo, y se aleja de los máximos anuales por encima de los 9.500 que rozó recientemente.
“No deberíamos obviar un escenario al corto plazo de vuelta a la próxima zona de soporte que vigilamos, proyectada a partir de los 9.034 / 8.967 puntos y, cuya perforación, confirmaría la incapacidad de plantear nuevos máximos anuales”, advierte el analista José Antonio González en su análisis técnico sobre el índice y los 35 valores que lo componen.
En la jornada de este viernes, las mayores caídas las ha protagonizado Acciona Energías Renovables, que ha caído un 3,54%, seguido del 3,40% que se ha dejado IAG (Iberia). En el lado de los avances, Cellnex ha subido un 1,17%, mientras que Laboratorios Rovi ha sumado un 1,14%.
Esta semana se ha conocido que Edizione, el holding industrial de la familia Benetton, ha elevado su participación en la compañíahasta el 9,903% del capital social, según figura en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El paquete accionarial de Edizione consta de 69,96 millones de títulos de la compañía y su precio de mercado actual se sitúa en unos 2.500 millones de euros.
Entre los protagonistas del día se ha situado también Ferrovial, que ha anunciado que pagará un dividendo flexible a cuenta de 0,2871 euros por acción el 26 de julio, el primero tras el traslado de la sede a Países Bajos. Consulta el calendario del dividendo flexible de Ferrovial y cómo cobrarlo aquí.
Mientras, los inversores han conocido también que Goldman Sachs ha elevado su participación en Sacyr por encima del 9%.
En el apartado de las recomendaciones, Credit Suisse ha recortado el precio objetivo de Fluidra de 32 a 27 euros. Mejores noticias para Amadeus, después de que los analistas de JP Morgan hayan aumentado su precio objetivo de 72 a 80 euros. Amadeus es el mejor valor del índice en lo que va de año, con una subida de más de un 40%, y los expertos de JP Morgan creen que tiene potencial para subir más de un 16% todavía.
Los bancos centrales han vuelto a ser protagonistas esta semana, con nada menos que tres entidades europeas celebrando las reuniones periódicas de sus comités de política monetaria: el Banco Nacional de Suiza (SNB), el Banco Central de Noruega (Norges Bank) y el Banco de Inglaterra (BoE). Si bien se esperaba que las tres instituciones volvieran a subir sus tasas de interés de referencia para seguir combatiendo la alta inflación, dos de ellas, las dos últimas, sorprendieron a los mercados al incrementar sus tipos en medio punto porcentual (50 puntos básicos) en lugar de en los 25 puntos básicos que esperaban los inversores.
Mientras, en EEUU el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, intervino entre el miércoles y el jueves ante la Cámara de Representantes y en Senado, reiterando que el banco central estadounidense volverá a subir sus tipos de referencia dos veces antes de que finalice el ejercicio, si bien ayer insistió en que todo dependerá de los datos que sobre la economía del país se vayan publicando en los próximos meses.
“Esta ‘agresividad’ mostrada por los bancos centrales, que no vieron venir el repunte de la inflación en su momento, cuando inundaron con liquidez el sistema, volvió a hacer temer a los inversores por el daño que estas políticas monetarias restrictivas pueden terminar haciendo en las economías desarrolladas”, explica Juan J. Fernández-Figares, de Link Gestión. “Bien es cierto que la renta variable, tras las alzas recientes, mostraba claros síntomas de sobrecompra, por lo que era bastante factible que corrigiera en un momento dado”.
Hoy en el resto de plazas europeas, el EURO STOXX 50 ha cerrado con un descenso de un 0,77%, mientras que el DAX alemán ha retrocedido un 0,98%. En París el CAC 40 ha bajado un 0,55%, mientras que en Londres el FTSE 100 ha cedido un 0,52%.
En los mercados de Asia, y con las bolsas de la China continental hoy cerradas por festividad local, también han dominado los números rojos. En Japón, el Nikkei 225 cayó casi un 2%, principalmente por las acciones de las distribuidoras, mientras que el Topix también cayó un 1,8%, principalmente por los industriales. El Kospi de Corea del Sur bajó un 0,9%, y el Kosdaq también experimentó una pérdida del 0,42%. S&P/ASX 200 de Australia cerró un 1,38% más bajo.
La inflación subyacente al consumo de Japón superó las previsiones en mayo y un índice que excluye los costes de combustible aumentó al ritmo anual más rápido en 42 años, lo que pone de relieve la creciente presión sobre los precios que mantendrá al banco central bajo presión para reducir gradualmente su estímulo masivo. El IPC subyacente, que excluye alimentos pero incluye los costes del combustible, subió un +3,2% interanual frente a +3,1% previsto aunque sí se ha moderado algo respecto a abril (3,4%). Sin carburantes ni alimentos frescos, el índice más vigilado por el banco de Japón, sube un 4,3% interanual en mayo.
Mientras, en EEUU Wall Street ha vuelto a abrir en rojo en la sesión de este viernes, y tanto el DOW JONES como el S&P 500 se encaminan a cerrar la semana con saldo negativo. También el tecnológico Nasdaq, que romperá una impresionante racha de ocho semanas consecutivas acumulando subidas.
En los mercados de renta fija, la rentabilidad del bono español de deuda a diez años baja hasta el 3,317%, dejando la prima de riesgo respecto a su homólogo alemán en 96,30 puntos. Al otro lado del Atlántico, el bono de referencia estadounidense a diez años ofrece un rendimiento en el mercado secundario de un 3,759%.
En las materias primas, los precios del petróleo registran caídas después de que las advertencias de los bancos centrales sobre los tipos de interés hayan alimentado la preocupación sobre la demanda de oro negro si las economías se ralentizan. Por el lado de la oferta, además, los recortes de Arabia Saudí se están viendo compensados por otros países como Irán o Rusia.
Así las cosas, el crudo Brent de referencia en Europa baja un 0,83%, hasta los 73,22 dólares por barril, mientras que los futuros del petróleo estadounidense ceden un 0,95% hasta los 68,53 dólares.
El euro baja un 0,71% en su cruce frente al dólar hasta establecer el tipo de cambio en 1,0881 dólares por cada moneda comunitaria.