'En España, observamos que el crecimiento está bajando, aunque menos de lo que habíamos previsto anteriormente', explicó afirmó Charles Collyns, director adjunto del servicio de investigación del FMI, al presentar una inédita actualización de las previsiones de abril y previa a las habituales de octubre.El Fondo prevé un crecimiento para España de 3,8% este año, un 0,1% menos que el año pasado, aunque un 0,4% más de lo que proyecta para 2008 y que mantuvo sin cambios en su revisión.'Seguimos teniendo preocupaciones', admitió, no obstante el responsable, tras recordar que el FMI había manifestado en el pasado sus dudas sobre el creciente déficit exterior de España y sus problemas de productividad.El responsable de la organización aprovechó la oportunidad para dar algunas recomendaciones al gobierno de Zapatero.'Pensamos que sería importante que el Gobierno muestre cierta moderación fiscal como contribución pora frenar el crecimiento de la demanda y seguimos alentándolo a dar pasos que aumenten la productividad, de manera que España pueda tratar su realmente amplio déficit' exterior, subrayó.