El descenso, lento pero sostenido, del Euribor se prolonga ya casi seis meses, desde que en octubre de 2008 la quiebra de Lehman Brothers produjera una cascada de medidas de los gobiernos y los bancos centrales de todo el mundo para aliviar el sistema financiero.


Desde entonces el Euribor sumó 91 sesiones consecutivas de descensos, interrumpidas con un leve repunte el 19 de febrero, para proseguir desde entonces ininterrumpidamente a la baja.


En estos casi seis meses el Euribor se ha dividido por tres y ha pasado del máximo histórico intradía del 5,526 marcado el 2 de octubre al mínimo de hoy.

Aún así, el indicador continúa por encima del tipo de interés oficial de la Eurozona, que el Banco Central Europeo (BCE) situó en su reunión del pasado día 3 en el mínimo histórico del 1,5 por ciento, tras aprobar una rebaja de 50 puntos básicos.

Ese día el presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, no quiso confirmar ni desmentir un nuevo recorte para abril, y aclaró que el BCE no descarta nada, ya que "no se ha decidido que el 1,5 por ciento es el tope", extremo que reiteró ayer en París al mismo tiempo que recordó que los tipos interbancarios en la zona euro son inferiores a los de Estados Unidos y los más bajos desde la Segunda Guerra Mundial.