Este resultado es consecuencia de unos ingresos no financieros del Estado que cayeron un 17,7% en agosto, hasta 83.838 millones de euros, y de unos pagos no financieros que se elevaron un 9,4%, hasta 98.476 millones de euros.En términos de caja, una metodología contable en la que se anotan los ingresos y pagos que efectivamente se han realizado durante ese periodo, el Estado alcanzó en los primeros ocho meses del año un déficit de 15.037 millones de euros, frente al superávit de 7.228 millones obtenidos en el mismo periodo de 2007.