Una cláusula MAC permite al comprador intentar reducir el precio acordado por un objetivo de compra o revocar su oferta si puede demostrar que se ha producido un cambio que ha tenido un impacto material en el valor del objetivo de compra. Este tipo de cláusulas, explica el rotativo, no resultan fáciles de probar, pero se utilizan con frecuencia en el sector de renta variable.