Justo en el momento en el que trascendían estas compras, la prima de riesgo de Italia marcaba nuevos máximos históricos desde la introducción del euro, por encima de los 430 puntos básicos.

La intervención del BCE, que ha incluido también, aunque en menor cuantía, la comrpa de deuda española, apenas sirve para relajar la tensión en el mercado secundario. El interés exigido al bono italiano a diez años se mantiene en el 6,2%, en zona de máximos desde agosto, cuando el BCE retomó su programa de adquisiciones de deuda.