"La Fed ha pasado de opinar que un dólar débil es positivo para animar las exportaciones de EEUU a darse cuenta de que esto también presenta riesgos para la inflación", según la fuente.La otra gran novedad de la semana ha sido el cambio de estrategia del Banco Central Europeo (BCE) que ahora apuesta por un sesgo restrictivo de la política monetaria, equivalente a aumentar los tipos de interés.Una consecuencia de este cambio de actitud de las autoridades monetarias de los dos principales bloques económicos del mundo es que "disminuye el riesgo de intervención para debilitar al euro o fortalecer al dólar" por parte de la Fed y del BCE.El análisis del banco alemán destaca que el euro se moverá cerca de 1,60 dólares y permanecerá en esos niveles mientras no cambie la estrategia de política monetaria del presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke.El hecho de que el BCE se haya decidido por una política restrictiva y que el Banco de Inglaterra no parece favorable a bajar sus tipos se traduce en que el euro se fortalecerá frente a la libra esterlina, según la fuente.La falta de dinamismo del crecimiento económico que se percibe en la economía británica, junto a la victoria de los "halcones" (partidarios de subir los tipos) en el Banco Central Europeo aconseja por lo tanto comprar euros contra libras esterlinas en este momento, según Deutsche Bank.