El Tesoro español celebró sus dos últimas subastas en un momento en el que la presión sobre países periféricos de la Unión Europea -Portugal, Irlanda y Grecia- se acentuó. En concreto, el pasado día 20 de abril, el Tesoro logró colocar 3.537,68 millones de euros en obligaciones a diez y trece años y subió el interés marginal de las primeras hasta el 5,483%, el más elevado desde enero.

Dos días antes, el 18 de abril, el Tesoro adjudicaba 4.658 millones de euros en letras a 12 y 18 meses, aunque también tuvo que subir los intereses marginales de ambas denominaciones.

De este modo, España puso fin a una racha de cinco subastas consecutivas en las que había logrado reducir el interés que paga por su deuda.