Las declaraciones del número dos de la Reserva Federal, Donald Khon, sobre la necesidad de que el organismo sea ágil en su política monetaria para paliar la situación por la que atraviesan los mercados financieros, son un auténtico revulsivo para las bolsas. Se notó anoche en Wall Street –con el repunte del 2,5 por ciento del Dow JOnes con todos sus componentes en positivo-, se notó esta madrugada en Japón y se está notando en las bolsas europeas en la apertura. Palabras que tienen su importancia porque vienen a dejar claro que ya no se descarta bajar de nuevo los tipos de interés al otro lado del Atlántico, pese a que ello acarree un aumento de las presiones inflacionistas de cara a 2008. La excusa está servida y los inversores se aferran a ella para decantarse por las compras. Y el dinero llega, sobre todo, a
Bankinter, que ha tenido incluso que ser suspendido momentáneamente por subasta de volatilidad cuando subía más de un 6 pro ciento. Todo a cuenta de la guerra entre Jaime Botín y Crédit Agricole
en la entidad.Lucha interna en BankinterLas acciones de la entidad bancaria alcanzan los 14,25 euros, después de que Jaime Botín, segundo accionista con un 16,3 por ciento, haya solicitado al Banco de España alcanzar un 29,9 por ciento, el límite máximo permitido sin tener que lanzar una OPA sobre el 100 por 100 del capital. El empresario responde de este modo a la entrada de Crédit Agricole en Bankinter. Mientras, la entidad gala asegura en La Tribune que no tiene intención de comprar el banco español. Le sigue por ganancias otro banco, el Sabadell, a pesar de descartar una fusión con Bankinter en este momento. Sus títulos repuntan un 2,44 por ciento.Con ganancias abultadas se mueve también Sacyr Vallehermoso, arriba un 1,7 por ciento, mientras que Acciona, Popular y Banesto suman más del 1 por ciento. Entre los pesos pesados, tanto el Santander como el BBVA ganan un 1,3 por ciento, mientras que la operadora Telefónica repunta un 0,22 por ciento. Por lo que toca a la petrolera Repsol, que ha anunciado que va a aumentar su dividendo de forma sustancial el año que viene, se revaloriza un 0,77 por ciento. Entre los perdedores del día en la apertura se colocan las eléctricas.