Radiografía del sector
En todos los países se repite la misma escena, caída en la facturación. Los datos hablan por sí solos: las ventas de vehículos en Estados Unidos han bajado un 32%, hasta las 838.156 unidades durante el mes de octubre mientras que en Europa la caída fue del 14,5%. El pronóstico de CSM Worldwide es que la producción automovilística en 2009 registrará su nivel más bajo en 19 años. En todo el mundo la crisis ha puesto a los fabricantes de coches a revisar sus estrategias de negocios, lo que se traduce en cierre de plantas, menor producción y pérdidas millonarias. General Motors busca desesperadamente un rescate que le permita salir a flote tras anunciar pérdidas por valor de 4.200 millones de dólares.
Principales referencias

Y la situación se repite a ambos lados del atlántico. La europea Nissan está llevando a cabo un drástico Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y no ha tenido problemas en admitir que el beneficio para el segundo semestre del año tiende a cero. Por el momento, los fabricantes de coches europeos también han solicitado ayuda al Banco Europeo de Inversiones (BEI) y se muestran confiados en que los fondos para la reactivación del crédito les permita recibir una inyección de 40.000 millones de euros. Y es que “el problema está en que hay un exceso de oferta, y poca demanda existente, aminorada sobre todo por la crisis”, según el director de Atlas Capital.
Aunque Toyota ha conseguido desbancar a General Motors el liderazgo mundial- con una facturación de más de 96.000 millones de euros- las asiáticas también se han visto afectadas. La reducción del mercado de Estados Unidos, donde las ventas cayeron más del 30% en octubre, y la apreciación del yen mermó sus beneficios. La agencia de calificación crediticia Fitch podría rebajar los ratings de Toyota precisamente por ese motivo.
Pero ¿dónde estaría la solución? El presidente de la General Motors, Rick Wagoner dejó presente el riesgo de quedarse sin liquidez en el primer semestre de 2009. De ahí que haya solicitado una ayuda inmediata al gobierno estadounidense para afrontar su desfase de tesorería. Las cifras que publicó Chrysler no son mucho mejores. Su consejero delegado, Bob Nardelli ve “muy difícil” la supervivencia del grupo a la actual crisis económica “sin ayuda del gobierno estadounidense”. Por ello piden 25.000 millones en préstamos para poder sobrevivir hasta 2010. En los últimos días se han sucedido rumores que integrarían a las automotrices estadounidenses en el plan de rescate de 70.000 millones de dólares dirigido al sector financiero. El presidente electo, Barack Obama abogó por una ley que permita utilizar el plan de rescate financiero para salvar estas compañías. La situación es clara: o reciben 25.000 millones o la quiebra. Un plan “inevitable si se quiere salvar el sector en Estados Unidos”, asegura Juan Carlos Castillo Montero, analista de Capital Bolsa. Para este experto, “GM está casi en quiebra técnica, incluso hay rumores de que tenía liquidez operativa sólo para lo que queda de año, por lo que necesita un plan de ayuda”. Por el momento, el Congreso estadounidense ha pedido un plan para ayudar a las tres de Detroit- GM, Chrysler y Ford- antes de votar sobre la concesión del capital. A pesar de que algunos miembros del Senado planeasen presentar una nueva propuesta, el presidente del Senado, Harry Reid, y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, han comunicado que el Congreso no votará hasta el próximo 8 de diciembre. En este contexto, ha explicado que las automovilísticas mismas tendrán que presentar un nuevo plan antes del 3 de diciembre exigiendo que el plan incluya “responsabilidad” por parte de las automovilísticas y “viabilidad” para el largo plazo.
En este contexto, el comisario de Industria de la UE, Guenter Verheugen, mostró el martes su apoyo a la intención del Gobierno de Alemania de prestar ayuda financiera a Opel (filial de GM) como una medida para evitar que la firma alemana desaparezca. La Comisión Europea debatirá próximamente un paquete de ayudas al sector, aunque ha advertido que deben limitarse a temas de I+D.Por el momento, en su búsqueda por la liquidez instantánea General Motors anunciaba que se desprendía del 3% que tenía en el fabricante de coches japonés Suzuki y Ford decidió vender un 20% de su participación en la firma nipona Mazda, hasta el 13%, para obtener una liquidez de 540 millones de dólares.
Según Cantos, y al ser un problema de exceso de oferta, la solución pasaría por cierres de capacidad o desaparición de algunas marcas. Pero ¿cómo queda el empleo? En lo que va de año se han perdido 10.000 empleos, y podría multiplicarse por dos “antes de mediados de 2009”, según la patronal de concesionarios Faconauto. Renault España mandará 4.000 empleados a casa por navidad “para ajustarse a la demanda” siguiendo los planes adelantados por su matriz “de reducir un 20% la producción en los centros europeos por el hundimiento del mercado”. GM calcula que cerca de 5.500 empleados tendrán que acogerse a un expediente de regulación de empleo (ERE). Además recortará su producción en varias cadenas de montaje. Medidas que costarán a la compañía al menos 300 millones de dólares hasta el 31 de diciembre. El colapso de la compañía con Chrysler y junto con Ford, supondría la destrucción de 3 millones de empleos durante el primer año y la confirmación de un terremoto económico e industrial. José Ramón Sánchez Galán, analista financiero admite que “el tamaño del sector automovilístico es impresionante, y sólo el de General Motors asombroso”.
Otra opción que han barajado algunas compañías es la fusión. Durante varias semanas General Motors-Ford-Chrysler fueron candidatas a crear un “conglomerado automovilístico” pero “cuando es por necesidad más que por opción, no es una buena solución”, admite Eduardo Vicho, codirector de EJD Valores. Aprovechando los precios de ganga de algunas compañías no es de extrañar que SolarWorld fije su objetivo en las cuatro fábricas de Wolkswagen en Alemania o que se despierten especulaciones al calor el interés de Porsche en la alemana, que pretendía incrementar al 75% su participación en la compañía.
Volkswagen: un oasis en medio del desierto.
El grupo automovilístico alemán Volkswagen vendió hasta octubre 5,29 millones de vehículos en todo el mundo, el 2,8 por ciento más que en el mismo periodo de 2007. ¿Cómo es posible tal y como está el sector? Para Cantos “la compañía integra lo que quieren los americanos, una plataforma común que supone un importante ahorro de costes”. Los títulos de la alemana- que el pasado 28 de octubre marcaron su máximo en los 1.005 euros y ahora están en los 385 euros- cotizan muy por encima de sus estimaciones. Oscar Moreno, de Renta 4 admite que “por fundamentales cuesta en torno a 100 euros”. Sin embargo, no es la única opción. Desde Atlas Capital admiten su gusto por BMW pues “al estar en un sector muy cíclico, en cuando se vea el punto de vuelta del mercado, el sector hará lo mismo”. En el caso de esta compañía, Cantos admite que “es un claro exportador de Estados Unidos- que ahora está mal- y con un euro más débil siempre le viene bien”, concluye.

