El comisario europeo argumenta que "hay que aceptar que la energía sea más cara y siga aumentando sin actuar con la fiscalidad, ayudando a los sectores más débiles y más afectados".Reconoce que "la fuerte presión inflacionista" provocada por la escalada del petróleo y de las materias primas alimenticias "es realmente muy preocupante", y dijo entender "perfectamente las reacciones de los ciudadanos y de las categorías más afectadas".Almunia también se refiere a la "recomendación política" lanzada ayer por el Ejecutivo europeo a Francia para que intensifique la consolidación presupuestaria para garantizar que su déficit público no vuelva a superar el 3% del PIB, tras constatar que no está corrigiendo el desequilibrio de las finanzas públicas tan rápido como debería. "El proceso de reducción del déficit no debe detenerse con el pretexto de que se ha pasado por debajo del 3% del PIB. El 3% no es más que una etapa hacia el objetivo que debe ser el retorno al equilibrio presupuestario a medio plazo", indica.Si bien dice entender que "ciertas reformas exigen que los poderes públicos les dediquen recursos públicos", insiste en que para hacerlo Francia debe obtener "márgenes de ahorro".Recuerda que reducir en al menos cinco décimas de PIB por año el déficit público fue un compromiso adoptado en la reforma del Pacto de Estabilidad no sólo por todos los miembros de la Zona Euro, sino por todos los países de la UE.En cualquier caso, el comisario europeo quiso quitar hierro a la significación de la "recomendación política", que no es "una advertencia" ni "un procedimiento disciplinario", sino "un consejo de política económica", según un procedimiento creado con la reforma del Pacto de Estabilidad.Respecto a las críticas de las autoridades francesas, que han considerado sesgadamente pesimistas las previsiones de crecimiento de su país hechas en Bruselas, Almunia puntualizó que "la experiencia nos enseña que las cifras de la Comisión están menos alejadas de la realidad que otras".Después de un déficit del 2,7% del PIB el pasado año, el Gobierno francés espera bajar esa cifra al 2,5% este año y al 2% en 2009, para lograr el "déficit cero" en el horizonte de 2012.El Ejecutivo comunitario, por su parte, augura un 2,9% este año y un 3% el próximo.