En noviembre de 2007, ADIA adquirió una serie de títulos convertibles en acciones de Citi ('equity units') por 7.500 millones de dólares (5.150 millones de euros). El acuerdo obligaba al fondo emiratí a convertir forzosamente dichos valores en acciones ordinarias del banco entre marzo de 2010 y septiembre de 2011.

El brazo inversor de Abu Dhabi alega en su reclamación que existieron elementos fraudulentos en relación con dicho acuerdo de venta, por lo que pretende obtener una compensación por daños de más de 4.000 millones de dólares (2.748 millones de euros).

Por su parte, Citigroup afirmó que las reclamaciones del fondo soberano "carecen de fundamento" y señaló que planea defenderse "vigorosamente" frente a dichas acusaciones