Tras seis sesiones consecutivas marcando nuevos máximos históricos, el Dow Jones, por fin, ha terminado la sesión hoy viernes, junto con sus homólogos en terreno negativo: Dow Jones: -0,01%; S&P 500: -0,03%; Nasdaq: -0,25%. En una semana festiva, con pocos inversores en el parqué, se pone fin a los titulares “récord” que han plagado los medios financieros estadounidenses en la última semana. En esta semana de bajo volumen, los periodistas han tenido que “rebuscar” para encontrar “algo” que podría llamar la atención. No han estado sin sus titulares.

La rentabilidad sobre el bono del Tesoro a 10 años ha vuelto a superar el 3% (igual que hizo ayer jueves). Pero todas las cosas en su contexto. Comentan desde BTIG que el acontecimiento es algo “que llamará la atención, pero no por ello vayamos a pensar que hace más daño económicamente que una rentabilidad en el 2,99%”. “Lo importante”, para estos expertos, “es que ocurre mientras los datos económicos mejoran”.

En cuanto a otro nivel psicológico, el barril West Texas de crudo ha logrado superar los $100 en la sesión de hoy después de que los inventarios del “oro negro” registrasen una caída de 4,7 millones de barriles. Este nivel psicólogico es relevante para los consumidores estadounidenses, adictos a sus coches, pero la mayoría de los expertos explican la subida no sólo a este descenso en los inventarios, sino al “flujo de datos económicos positivos”. Tampoco sobra, desde un punto de vista global, señalar el nuevo máximo anual en el Euro/Dólar. La debilidad en el “billete verde” no suele pasar desapercibido en la demanda de crudo en los mercados internacionales.

Tras la tensión sobre el tapering (reducción en el programa de compra de activos) de la Fed –que quedó “zanjado” con el recorte el pasado 18 de diciembre en $10.000 millones mensuales- todo apunta a que los inversores tienen vía libre para centrarse en… la economía. Los estrategas de Market Securities afirmaron esta semana que “Estados Unidos está mejorando y hay recuperación. Hace tiempo que hemos estado negociando con el tapering de la Fed, pero el mercado se ha dado cuenta de que es una retirada menor de estímulos y que, una vez todo dicho y hecho, implica que la economía registra una mejora. Es una señal positiva”.

En este contexto, y de cara a los máximos de Wall Street, cabe destacar la “noticia” empresarial de la sesión: el desplome de hoy del 13% en las acciones de Twitter. ¿Qué ha pasado? Los analistas de Macquarie han recortado su recomendación hasta infraponderar desde neutral. Cabe destacar que la tecnológica ha subido más de un 70% durante el mes de diciembre, algo que estos expertos creen que es “demasiado”. “Creemos que no ha cambiado nada en sus fundamentales para justificar la fuerte subida en sus acciones en las últimas semanas. Para ir al grano, creemos que esto va a ser la explicación más corta de la historia de un recorte en recomendación: nada ha cambiado desde que iniciamos la compañía con una recomendación de neutral el pasado 11 de diciembre, salvo que sus acciones han subido un 40%”, explican estos estrategas en su informe.

En esta línea, los expertos de Bespoke Investment señalan que el precio objetivo del consenso para Twitter se situaba un 35% por debajo de los niveles actuales. “Evidentemente, Twitter se escapó de los analistas con las fuertes ganancias de las últimas semanas”, comentan. “Ahora los analistas van a tener que decidir si mantienen sus precios objetivos o si los suben según el precio actual. Si escogen la segunda opción, Twitter podría subir aún más”, concluyen estos analistas.

Esto hace pensar en un post escrito el pasado 10 de diciembre de Robert Seawright, jefe de inversiones de Madison Avenue Securities, en el que afirmó que “la única previsión correcta es que las previsiones del mercado casi siempre se equivocan”. En ello, Seawright reveló las previsiones de los expertos para el S&P 500 a finales de 2013 y señaló que –en aquel momento, antes del rally actual- las estimaciones de los “expertos” se situaron un 17,5% de media por debajo del precio actual.

Lo que realmente importa a los inversores es si Wall Street va a seguir desafiando a los expertos (por no decir los agoreros que llevan meses diciendo que “la corrección es inminente”). En cualquier caso, lo peor que puede hacer un inversor es dejarse llevar por la “euforia compradora” e invertir cuando ya sea demasiado tarde.

Terminamos entonces con la cautela de nuestro analista técnico de Bolsamanía, José María Rodríguez, respecto al mercado español. Recomienda vigilar el precio de BBVA que considera ser el más fiable indicador adelantado del Ibex 35. “Sí que creo que por encima de los 9 euros, en precios de cierre, tendríamos la confirmación de un ataque serio hacia los máximos anuales del Ibex y los máximos anuales del BBVA, los 9,40 euros”.

Jason Martin