Bajan los futuros de Wall Street antes de conocerse el dato de empleo

La tasa de desempleo en Estados Unidos descendió hasta el 3,8% en el mes de febrero, dos décimas menos que en enero, por lo que el dato sigue cerca del mínimo histórico desde 1969 alcanzado en noviembre, cuando se situó en el 3,7%, según las cifras publicadas este viernes por la oficina de estadísticas laborales del Departamento de Trabajo estadounidense.

El descenso de la tasa de paro se contrapone a los datos de nuevos empleos. En febrero, la economía estadounidense genero tan solo 20.000 empleos no agrícolas, frente a los 311.000 que sumó en enero, principalmente por la desaceleración en la contratación en todos los sectores y la destrucción de empleo en la construcción. La previsión que contemplaba el consenso era una creación de 180.000 empleos.

Wall Stret analiza también las dudas que comienzan a surgir sobre la posibilidad de que el acuerdo comercial entre EEUU y China no esté tan cerca de cerrarse como se había venido hablando. Al término de la sesión de este jueves, los índices cayeron con cierta intensidad, si bien cerraron lejos de sus mínimos del día. El Dow Jones bajó un 0,78%; el S&P 500, un 0,81% y el Nasdaq, un 1,13%.

Hoy se ha conocido que las exportaciones del gigante asiático cayeron drásticamente en febrero, con un descenso interanual del 20,7%, su peor lectura desde febrero de 2016, tras un incremento del 9,1% interanual en enero.

Los economistas consultados por The Wall Street Journal esperaban una caída del 6%. Por su parte, las importaciones cayeron un 5,2% interanual en febrero, tras una caída del 1,5% interanual en enero.

En cuanto a la situación de las relaciones comerciales entre EEUU y China, ayer informó el New York Times de que ambos países han alcanzado un acuerdo global que podría conllevar la eliminación de gran parte de las tarifas aplicadas en ambos países. Ello supondría que el gigante asiático adquiriría una mayor cantidad de productos americanos y una mayor apertura de sus mercados a las compañías extranjeras. Pero el artículo señala que los negociadores aún no han cerrado asuntos clave, como cuándo se eliminarán las tarifas y como asegurarse de que China cumplirá lo pactado.

Por otro lado, según señaló ayer un asesor de seguridad estadounidense, el presidente de EEUU, Donald Trump, está abierto a conversar de nuevo con Corea del Norte sobre desnuclearización, pese a los informes que apunan que Pyongyang está reactivando partes de su programa de misiles.

Esta semana, dos grupos de expertos de Estados Unidos y la agencia de espías de Seúl dijeron que Corea del Norte estaba reconstruyendo el sitio de lanzamiento de un cohete, lo que llevó a Trump a decir que estaría "muy, muy decepcionado con el Presidente Kim" si fuera cierto.

De esta forma, Wall Street se contagia también de las caídas de las principales bolsas europeas, que en algunos casos supera el 1%, afectadas por las conclusiones de la reunión de ayer del BCE.

El organismo mantuvo sin cambios los tipos de interés pero revisó a la baja de una manera significativa las estimaciones de crecimiento e inflación e introdujo cambios relevantes en política monetaria.

Por un lado, modificó la guía sobre tipos de interés retrasando cualquier subida hasta, al menos, el final de 2019, frente a la decisión de "hasta durante el verano 2019" en el comunicado anterior.  Además, introdujo un nuevo programa TLTRO III para el sector bancario comenzando en septiembre 2019 y con vencimiento a dos años.

El BCE sorprendió con una revisión a la baja muy significativa tanto de crecimiento como de inflación. La nueva estimación de inflación 2021 (1,6%) se aleja aún más de su objetivo (cercano pero inferior al 2%).

En el mercado de materias primas, los precios del petróleo registran descensos cercanos al 2%, debido al empeoramiento en el panorama económico global tras las advertencias del BCE de una debilidad sostenida, y de nuevos datos que mostraron descensos en las importaciones y exportaciones de China el mes pasado.

El Brent de referencia en Europa se deja  un 12,9%, hasta los 64,35 dólares por barril; mientras que el West Texas estadounidense cae un 3%, hasta los 54,94 dólares.