Wall Street cerró este jueves mixto y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, ascendió un 0,15 % en una sesión marcada por unos resultados empresariales mejor de lo esperados, entre ellos los de Morgan Stanley, que sin embargo no rescataron del rojo ni al S&P 500 ni al Nasdaq.
Según datos al cierre de la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones subió un 0,15 %; pero el selectivo S&P 500 perdía un 0,33 %. Por su parte, el Nasdaq Composite cayó un 0.7%.
Tras las caídas que experimentaron ayer los índices estadounidenses, hoy los principales índices de Wall Street comienzan la última sesión de la semana en verde, apoyándose en los buenos resultados presentados por las entidades bancarias y el inesperado aumento de las ventas minoristas de junio. Por su parte, el Dow Jones se apunta un 0,14%, el S&P 500 un 0,25% y el Nasdaq, que lidera las subidas, un 0,41%.
Sin duda, semana intensa para el parqué neoyorquino con la publicación de resultados del primer semestre por parte de grandes empresas como JP Morgan, Goldman Sachs, Bank of America o Morgan Stanley que, en general, han superado las expectativas.
Sin embargo, la semana ha estado señalada también por el dato del IPC de junio, que marcaba su mayor alza desde el 2008 con subidas de 5,4%, y con las declaraciones que han surgido entorno a la inflación estadounidense.
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, aseguró este miércoles que la inflación se mantendrá elevada "en los próximos meses" en EEUU, y subrayaba que la economía está "lejos" de los objetivos del banco central para plantear un cambio en la política monetaria, que fue en lo que se fijaron los inversores.
A todo esto sumaba ayer nuevas declaraciones ante el Comité de Servicios Bancarios del Senado de EE.UU.: "La inflación está muy por encima del 2%. Sería inapropiado reaccionar a la inflación si sólo fuese temporal. La Reserva Federal continuará vigilando las amenazas a la inflación”, a lo que añadía, "seguimos muy lejos de la barrera impuesta por la Reserva Federal para iniciar el tapering".
Por su parte, James Bullard, presidente de la Reserva Federal de San Luis, afirmó “Estamos en una situación en la que podemos empezar con el tapering. Cuando se trata de tapering, la Fed debería mantener abiertas sus opciones. Parte de la alta inflación que estamos viendo es temporal y podría prolongarse hasta 2022”.
A estas declaraciones se sumó también el presidente de la Reserva Federal de Chicago, Charles Evans, “Si la inflación es más persistente a lo mejor necesitamos ajustar nuestra posición más pronto de lo esperado”.
En la agenda macro del día destaca la publicación de las ventas minoristas de junio y la lectura preliminar del mes de julio del índice de sentimiento de los consumidores.
En el caso del primero, las ventas minoristas, aumentaron inesperadamente en junio, ya que la demanda de bienes se mantuvo fuerte incluso cuando el gasto está volviendo a los servicios, reforzando las expectativas de que el crecimiento económico se acelere en el segundo trimestre.
Las ventas minoristas se recuperaron un 0,6% el mes pasado, según el comunicado de este viernes del Departamento de Comercio. Los datos de mayo se revisaron a la baja para mostrar que las ventas cayeron un 1,7% en lugar de un 1,3% como se informó anteriormente.
Excluyendo automóviles, gasolina, materiales de construcción y servicios de alimentación, las ventas minoristas aumentaron un 1,1% el mes pasado después de una disminución revisada a la baja del 1,4% en mayo.
Las denominadas ventas minoristas subyacentes corresponden más estrechamente con el componente de gasto del consumidor del Producto Interno Bruto. Anteriormente se estimaba que habían caído un 0,7% en mayo.
"Con la reapertura de la economía, el gasto en servicios ha comenzado a repuntar y podría desviar parte del gasto de bienes hacia algunos servicios que no están incluidos en el informe de ventas minoristas", dijo Kevin Cummins, economista jefe de NatWest Markets en Stamford, Connecticut.
Desde el lado de negocio, Morgan Stanley, que presentó sus resultados del primer semestre en la sesión de ayer, ganando 7.631 millones de dólares (unos 6.500 millones de euros), un 56% más que en el ejercicio anterior. Asimismo, obtuvo un beneficio neto de 3.511 millones de dólares y facturó 14.759 millones de dólares.
Por su parte, Bank of New York aumentó sus beneficio un 9,9% respecto al 2020. La compañía alcanzó unos ingresos por 3.960 millones.
Moderna subió un 7,5% después de que S&P Dow Jones Indices dijera que la farmacéutica se unirá al índice S&P 500 a partir del inicio de la cotización el 21 de julio, reemplazando a Alexion Pharmaceuticals.
Por otro lado, según rumores de mercado, la compañía estadounidense Netflix agregará videojuegos a su servicio de suscripción en algún momento del próximo año, aunque también se habla de ofrecer una plataforma aparte.
La OPEP indicó que la producción aumentó en +590 k b/d en el mes de junio hasta un total de 26,03 M b/d. En 2022 espera que el consumo vuelva a niveles previos a la pandemia. Espera que la demanda aumente en +3,28 M b/d hasta un total de 99,86 M b/d en 2022. Mantiene su perspectiva de que la demanda global aumente en +5,95 M b/d en 2021