Tesla es probablemente el fabricante de coches del que más se habla en el mundo y es un ejemplo perfecto de como las expectativas de flujos de caja futuros se descuentan en el precio actual de la acción. Pese a que todavía no está del todo claro si Tesla obtendrá beneficios este 2017, ya ha sobrepasado a General Motors esta semana como la compañía de automóviles más valiosa de los Estados Unidos por capitalización bursátil. Siendo la compañía con más pérdidas de todas las del sector automovilístico, está a punto de superar en capitalización de mercado a la empresa de coches más rentable del mundo, BMW con una capitalización de mercado de 53.760 millones de euros.

Muchos participantes del mercado creen desde hace meses que el potencial en el precio de la compañía está sobrevalorado. Se basan en un ´´short ratio´´ del 26%. El ´´short ratio´´ representa la cantidad de acciones en corto que no han sido recompradas para cerrar la posición vendedora. Esa cantidad divida por el volumen medio diario nos da el ´´short ratio´´. Las firmas de inversión están obligadas a reportar sus posiciones cortas.  Un alto ratio de interés en corto puede apretar el gatillo para un ´´short squeeze´´. Un ´´short squeeze´´ se puede dar cuando una acción con un ‘’short ratio’’ elevado inicia una tendencia alcista más fuerte de lo esperado debido a la influencia de noticias positivas. Los vendedores en corto se ven entonces obligados a recomprar las acciones para limitar su, en teoría, riesgo ilimitado, que puede llevarles asumir considerables pérdidas. Los fuertes datos de ventas y las recomendaciones de los analistas han ayudado a la acción a revalorizarse un 23% en los últimos 20 días. Elon Musk no pudo resistirse a enviar un mensaje en twitter a los vendedores en corto de Tesla ´´Stormy weather in Shortville´´ (Tiempo tormentoso en corto-landia).

Tesla y BMW en bolsa