Los analistas, comienzan a ver con muy buen tono a las acciones de Moderna, uno de los valores castigados ya, como veremos después con detalle, a doble dígito en el mercado en lo que va de año. Ese efecto oportunidad, desde sus niveles actuales de precio, es uno de los factores para tener en cuenta, para establecer el empuje en el mercado de la última semana sobre el valor.
Pero hay otro factor más significativo: la mejora de los analistas a cuenta de las últimas noticias sobre Moderna, que van más en línea con tachar de la lista a competidores que por méritos propios. Así, la mejor con diferencia, llega desde Brookline Capital Markets que mantiene su calificación de compra sobre Moderna y le augura una mejora exponencial con su precio objetivo en el mercado, hasta los 506 dólares lo que establece un posible aumento del 220%, más que triplicar su cotización actual.
Pero la mejora también es significativa en el caso de Jefferies, que refrenda su calificación de compra sobre las acciones de Moderna en el mercado con un precio objetivo que le otorga de 275 dólares por acción.
Desde TipRanks de los 15 analistas que recogen su consenso, 9 optan por comprar sus acciones, 5 por mantener y 1 por vender, con un precio objetivo medio que alcanza los 222,86 dólares por acción, con potencial alcista del 41,35%.
Pero hay mucho más. Para TD Cowen, la mejora va de su apuesta desde mantener sus acciones hasta comprar, con un precio objetivo que crece hasta los 180 dólares por acción desde los 150 anteriores para el valor. Considere la firma que la compañía se va a convertir en todo un líder en el mercado de vacunas contra el virus respiratorio sincitial o RSV en sus siglas en inglés.
Al igual que las vacunas candidatas de la firma en su lucha contra la gripe. Algo que cambiará en menos dependiente de los ingresos de la vacuna contra la Covid19 y que puede traer consigo una mejora sustancial de sus ingresos.
Y es que los trabajos del ARN mensajero enseñan a las células humanas a producir una proteína que inicia una respuesta inmunitaria contra una enfermedad en particular para poder neutralizarla.
En su gráfica de cotización vemos que el valor recupera un 7,5% en la última semana, con ganancias que alcanzan el 12% en el último mes, mientras que, en el trimestre, los recortes son del 11,8% y, en lo que va de año, la caída es del 12,10% para las acciones de Moderna.
Y más cuando uno de los actores en liza, como es Johnson & Johnson se retira de la carrera para establecer esta vacuna contra el RSV. Moderna además espera que su vacuna contra el virus sea aprobada en esta primera parte del ejercicio. Y es que, en los primeros estadios, la vacuna de Moderna ha mostrado una eficacia global del 83,7% frente al 82,6% de GSK Sp ADR y al 66,7% de la de Pfizer, aunque en el caso de estas dos últimas, la aprobación se puede producir antes que con la vacuna de Moderna.
Si bien Johnson&Johnson ha abandonado esta carrera para gastar en medicamentos que le proporción más beneficio, la lucha contra el RSV se ha convertido ya en una prioridad en Estados Unidos ante el aumento de casos que se ha producido en el último invierno y sin que haya vacuna alguna a la que se adhiera.
Y es que Moderna tiene una gran vía de escape por parte de la merma de ingresos por su vacuna anticovid Spikevax, porque, aunque ahora se venderá más cara, en torno a los 130 dólares por dosis frente a los precios de la pandemia, una vez termine en mayo la emergencia de salud pública en Estados Unidos, los costos de fabricación se elevarán, tras quedar sin los fondos gubernamentales del país para el desarrollo de la vacuna.
También está desarrollando, dentro de su pipeline, una vacuna contra el cáncer personalizada junto con Merck & Co Rg-WI, que ya presenta una designación de avance por parte de la FDA, el equivalente americano de la Agencia del Medicamento Europea.
