El Informe de Empleo de Estados Unidos correspondiente al mes de septiembre que se conocerá hoy a las 14:30 hora española, una hora antes de que abra Wall Street, se publica con un retraso de 18 días por el cierre del Gobierno federal en Washington (shutdown). Aunque los expertos subrayan que estos datos condicionarán el calendario de retirada de estímulos de la Reserva Federal (Fed), muchas son las voces que consideran que precisamente este Informe de Empleo no tendrá un efecto determinante, porque no incluye el impacto del shutdown que ha afectado al mes de octubre, no a septiembre.

Pero esta postura solo tiene sentido si se asume que para el equipo de Ben Bernanke el impacto del shutdown en la economía, en concreto en el mercado laboral, y de la incapacidad de Washington para acordar un aumento del techo de deuda son dos factores determinantes a la hora de iniciar el tapering. Esta teoría es discutible porque, para empezar, el efecto de ambas circunstancias en la economía no ha sido relevante, apunta en MarketWatch Joseph LaVorgna, de Deutsche Bank. Aunque claro, esta aseveración también tiene sus detractores. El pasado viernes, el influyente Washington Post titulaba con un “los shutdowns no son baratos”.

El consenso espera una creación de empleos de unos 180.000-185.000, frente a los 169.000 que se crearon en agosto, así como una tasa de paro estable en el 7,3%. Con estas previsiones en mente y ante las diferentes teorías sobre en qué se fija la Fed, Ishaq Siddiqi, estratega de mercados de ETX Capital, reconoce que sean “buenos o malos los datos, la reacción probablemente será positiva. Si la creación de empleo sale por debajo de 180.000, los inversores interpretarán que la Fed tiene otra razón para mantener intactas las inyecciones de liquidez (QE), mientras que si es superior a 180.000, se le restará importancia al dato porque no incluye el impacto del shutdown”.

Interpretaciones para todos los gustos en un momento en el que también hay posturas “de todos los colores” en el seno de la Fed. ¿Son los datos de empleo los que determinarán el inicio del tapering? ¿Dependerá de que los políticos estadounidenses logren un acuerdo sobre el límite de deuda y la financiación del Tesoro? ¿Influye el hecho de que Bernanke esté “de salida” y Yellen vaya a aterrizar en la presidencia coincidiendo con las negociaciones políticas sobre el techo de deuda? Muchas preguntas de difícil respuesta porque en la economía, todo está interconectado.

El tapering se descontaba para septiembre a pesar de que la tasa de desempleo se mantenía por encima del 6,5%, así que referencias sobre el mercado laboral como el Informe de Empleo parecen no ser los únicos determinantes para la Fed. Parece más relevante para la autoridad monetaria que Estados Unidos sea capaz de encontrarle un desenlace a la “telenovela fiscal”, como la define Siddiqi. “Muchos en el mercado están convencidos de que la Fed abandonará la idea del tapering hasta que termine definitivamente la telenovela fiscal”, explica el estratega de ETX Capital. De hecho, David Rosenberg, de Gluskin Sheff, también condiciona el comportamiento de la Fed a la situación fiscal del país, aunque no deja de mencionar el Informe de Empleo.

Estas son sus palabras en MarketWatch: “El tapering no se va a producir en la reunión de la Fed de octubre, aunque los números del mercado laboral siguen siendo un telón de fondo que preocupa a la autoridad monetaria de Estados Unidos (…) Si los datos de hoy sugieren que el empleo mejora y las previsiones son optimistas, y si milagrosamente terminamos con una exitosa conferencia sobre el presupuesto entre los Representantes y el Senado el 13 de diciembre, no podemos descartar un modesto tapering el último mes del año”.

Sobre la respuesta a la última de las preguntas (¿Influye que Bernanke esté “de salida” y Yellen vaya a aterrizar en la presidencia coincidiendo con las negociaciones políticas sobre el techo de deuda? ), ya lo comentaban ayer los expertos de Bankinter: ni Bernanke va a arriesgar su buena gestión de la Fed durante la crisis, ni Yellen tomará ninguna decisión tan importante nada más asumir el cargo.

EUROPA A MEDIA SESIÓN

Indefinición de nuevo en las bolsas europeas a media sesión, que no se atreven a decantarse ni por las compras ni por las ventas a la espera del Informe de Empleo. Las principales plazas europeas se mueven con signo mixto. El ibex 35, por ejemplo, cae un 0,16% aunque mantiene los psicológicos 10.000. Pero el Cac y el Eurostoxx se mueven con leves alzas. Los futuros americanos tampoco se deciden y cotizan planos.

María Gómez