Los analistas de HSBC han recortado su recomendación sobre la renta variable de Estados Unidos hasta infraponderar desde neutral. En su opinión, el periodo más atractivo para Wall Street ha quedado atrás, después de las ganancias del 30% registradas por el S&P 500 el año pasado.
Su previsión es que el principal indicador mundial registre una subida del 4% en 2014, hasta 1.900 puntos. “Pensamos que la Fed seguirá recortando sus compras de activos en 2014 y que los mercados comenzarán a anticipar la primera subida de tipos en 2015, lo que será negativo para las acciones, sobre todo en Estados Unidos”, afirma Garry Evans, director de renta variable global de HSBC.
“Favorecemos países y sectores con el mayor potencial para sorpresas al alza en resultados empresariales. Así que recortamos a infraponderar, porque las ganancias están cerca de sus máximos y las valoraciones parecen elevadas en comparación con el resto del mundo. Y la Fed terminará su política de estímulos antes que otros bancos centrales de países desarrollados”, añade este experto.
Como resultado, las acciones de Estados Unidos pueden estar bajo presión durante los próximos trimestres, debido a que cotizan a un ratio precio/beneficio de 20 veces (una prima del 20% sobre el mercado global). “Nuestro análisis muestra que los mercados tienden a comportarse peor en el corto plazo cuando las valoraciones alcanzan estos extremos”, concluye Evans.
C.P.O.