Tal y como se esperaba, los presupuestos de 2014 que ha presentado hoy Francia incluyen recortes del gasto público por importe de 15.000 millones de euros y subidas de impuestos por valor de 3.000 millones, así como medidas drásticas contra la evasión. Las “cuentas” de Hollande incluyen también una ligera reducción de la presión fiscal sobre las empresas, en un intento de recuperar competitividad y ayudar a la economía gala a crecer más rápido.

En cuanto a las previsiones, el Ejecutivo galo espera que la deuda alcance el año que viene el 95,1% del PIB, por encima del 93,4% estimado para este año. Por su parte, las estimaciones de crecimiento cumplen con el consenso: 0,1% en 2013 y 0,9% para el próximo ejercicio. Finalmente, el Gobierno prevé un déficit del 4,1% del PIB en 2013 y del 3,6% en 2014, alcanzarán el 3% marcado por la Unión Europea (UE) en 2015.

S.C.