Pérdidas moderadas en las bolsas europeas a media sesión, mientras todo el mundo habla de la crisis provocada por el derribo de un avión de pasajeros sobre territorio ucraniano, que ha provocado la muerte de 298 personas.
Las consecuencias de este suceso son imprevisibles, y ya saben que la incertidumbre es enemiga de las bolsas. Los primeros análisis son contradictorios, ya que Ucrania acusa a Rusia y los separatistas de haber lanzado el misil que derribó el avión, mientras Rusia acusa a Ucrania de lanzar el misil para intentar derribar el avión presidencial de Vladimir Putin, que al parecer pasó ayer por la zona (consulte aquí todas las novedades).
Alan Diehl, un antiguo investigador de la National Transportation Safety Board, ha comentado a CNBC que “no puedo imaginar que ni el Gobierno ruso ni el ucraniano ni los rebeldes quisieran derribar un avión de pasajeros de otra nacionalidad. Creo que, con toda probabilidad, ha sido algo accidental. La buena noticia es que Estados Unidos tiene satélites que pueden decir dónde, cuándo y quién disparó el misil”, ha añadido este experto.
Mike van Dulken, director de Accendo Markets, afirma que las informaciones sobre el avión centrarán la atención de los inversores durante la jornada; y que es previsible que los mercados de valores mantengan el mal tono de ayer de cara al fin de semana.
"En nuestra opinión, de haber sido el ataque un error de cálculo o un acto aislado de una facción extremista de las involucradas en el conflicto, concretamente rebelde prorrusos, el impacto en los mercados de valores será reducido. De estar involucrada Rusia, este sería el peor escenario para las bolsas, ya que las tensiones entre este país y el mundo occidental, encabezado por Estados Unidos, aumentarían sustancialmente porque provocaría, ahora sí, la aplicación de sanciones de gran calado a Rusia, además de intentar aislarla políticamente", afirman desde Link Securities.
OPORTUNIDAD CON SANGRE FRÍA
Por su parte, desde Bankinter afirman que “el impacto del derribo del avión de pasajeros en Ucrania, del endurecimiento de las sanciones sobre Rusia y del agravamiento en Palestina aún hará algo de daño hoy, pero nos arriesgaríamos a decir que la sesión irá mejorando poco a poco. ¿Hasta cerrar las bolsas en positivo? Es posible”.
Estos expertos añaden que “si no surgen más 'sustos' y la Confianza de la Universidad de Michigan, el Indicador Adelantado y las cifras de General Electric, que se publican por la tarde, salen como se espera - más bien buenos - las bolsas podrían aplanarse o incluso entrar en modesto positivo. Los principales activos refugio (Bund, yen, CHF, etc) seguramente corregirán los excesos de ayer”.
Su conclusión es que “es obvio que la geopolítica será lo que realmente condicione la sesión, así que para acertar hoy es preciso ser más adivino que analista. Defendemos que conviene no olvidar que el ciclo es pro-bolsas y que éste es el factor predominante, aunque en el rabioso corto plazo se pueda ver afectado por la geoestrategia. Esto parece, de nuevo, otra oportunidad de entrada en el mercado a precios inferiores. Claro que, para actuar en consecuencia es preciso elevar la perspectiva y tener algo de sangre fría”.